“Como presidente de Chile voy a trabajar por esa mayoría silenciosa, que tal vez no es capaz de hacer escuchar su voz, pero que tengo la certeza de que quiere vivir en paz", afirmó Piñera luego de que más de 70 mil jóvenes se manifestaran en contra de su gobierno.
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, afirmó la mañana de este viernes que el gobierno defenderá el derecho de las personas que deseen vivir y progresar en paz, luego que este jueves se produjeran las manifestaciones más masivas de los últimos 20 años, ocasión en que más de 70 mil manifestantes repletaron la principal arteria de la capital chilena para protestar en contra del sistema de educación.
Del mismo modo, dijo que “nunca me voy a cansar de promover, predicar y practicar la unidad nacional, porque estoy totalmente convencido de que en la unidad y el diálogo está nuestra fortaleza, y en la división y la intransigencia está nuestra debilidad”.
Piñera manifestó su rechazo a las acciones de violencia que se vivieron en paralelo a la multitudinaria marcha por la Alameda Bernardo O'Higgins, durante la ceremonia en que la Policía de Investigaciones (policía civil chilena) conmemoró sus 78 años de vida.
“Como presidente de Chile voy a trabajar por esa mayoría silenciosa, que tal vez no es capaz de hacer escuchar su voz, pero que tengo la certeza de que quiere vivir en paz, progresar en paz y construir un país en que el diálogo reemplace a la intransigencia y que los acuerdos sustituyan a la violencia”, agregó Piñera.
“Nuestro gobierno va a defender y a respetar la libertad de expresión y la libertad de manifestación, pero con la misma fuerza va a defender el derecho de la inmensa mayoría de los ciudadanos chilenos de poder vivir y progresar en paz”, aseguró.
Del mismo modo, sostuvo que existen límites a las formas en que se expresan esas manifestaciones. “El primero es que no vamos a tolerar la violencia, la delincuencia, la destrucción, el vandalismo y el ataque cruel, despiadado y cobarde a los miembros de nuestras policías, como lo hemos visto en los últimos días”, explicó.
Piñera añadió que “el segundo límite es que también hay que respetar los derechos de los demás chilenos. Porque estoy absolutamente convencido -y creo que aquí comparto un pensamiento de todos, o la inmensa mayoría de los chilenos-, de que la mayoría de los estudiantes en Chile quiere estudiar, que la mayoría de los trabajadores chilenos quiere trabajar, que la mayoría de los ciudadanos quiere vivir en paz y que la mayoría de los chilenos queremos vivir en un país que progresa con libertad, con justicia y en paz”.