“Hay sectores de las Fuerzas Armadas que están probando el pulso, a ver si todavía prevalece el poder militar sobre el poder civil. En la patria nueva de democracia plena del siglo XXI aquí manda el poder civil legítimamente electo en las urnas”, dijo el Jefe de Estado.

Quito. El presidente de Ecuador, Rafael Correa, advirtió este sábado que el poder civil prevalecerá por sobre las pretensiones de ciertos sectores castrenses activos y pasivos que están desafiando al Estado de Derecho.

“Hay sectores de las Fuerzas Armadas que están probando el pulso, a ver si todavía prevalece el poder militar sobre el poder civil. En la patria nueva de democracia plena del siglo XXI aquí manda el poder civil legítimamente electo en las urnas”, dijo el Jefe de Estado al refutar las recientes resoluciones de consejos militares que no sancionaron las faltas disciplinarias de oficiales que habrían faltado el respeto al presidente de la República.

Se trata de una serie de respuestas ofensivas a una carta enviada por el presidente Correa en la que explicaba aspectos de las reformas a la Ley de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas que algunos sectores, sobre todo de militares en retiro, advierten como un riesgo para el sostenimiento del sistema de pensiones.

Días atrás, el presidente Correa interpuso una acción de protección contra los cinco integrantes de un consejo de disciplina y el viernes otro consejo resolvió no sancionar a un teniente de navío alegando incumplimiento de los plazos en el trámite, algo que el ministro de Defensa, Ricardo Patiño, tildó de “leguleyada”.

“Esta gente está desafiando el Estado de Derecho, ¡ya basta! Soldados de mi patria a rebelarse contra esta clase de comportamiento. Tenemos gente patriota, verdaderos soldados que están contra estas cosas”, mencionó Correa.

Advirtió que se tomarán toda “todas las medidas pertinentes” para rechazar estos abusos y ofensas al Estado de Derecho, a la inteligencia, a la autoridad del presidente de la República.

Hasta la fecha son 4 procesos disciplinarios en los que no se aplica sanción. El presidente de la República indicó que se trata de una disposición de un alto oficial que buscaría desafiar al poder civil.

“Sabemos que esto fue orden de un almirante, ya lo tenemos verificado, que reunió a todos estos consejos para decirles `dejen todo en la impunidad, nos vamos a burlar de la autoridad civil`, no lo van a lograr. En esto me juego la vida, pero aquí prevalecerá el principio de autoridad, la democracia, las leyes de la República”, aseguró el jefe de Estado.

El presidente manifestó que si los militares quieren ser deliberantes deben renunciar a la potestad del uso de las armas. “Si quieren ser deliberantes, dejen de tener un arma al cinto, pero ser deliberantes armados es gravísimo para una democracia. Son cosas fundamentales, el que no está de acuerdo con eso respetamos mucho su criterio, pero debería retirarse de las Fuerzas Armadas si quiere ser deliberante”, sostuvo.

Tildó a las cartas de respuesta como “panfletos políticos” que incluían insultos al Presidente y dijo que por el odio a su persona juegan con los fundamentos de la República.

Pero también destacó la reacción de la sociedad civil a través de un grupo de ciudadanos que emitieron un comunicado público refutando al general Ernesto González, exjefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas que dijo que el punto de quiebre en la relación con el Gobierno fue la conformación de la Comisión de la Verdad que investigó los abusos contra los derechos humanos cometidos en entre 1984 y 2008.