La decisión se produjo después de que el New York Times dijo que el comandante del Ejército ordenó duplicar el número de muertes en combate, capturas y rendiciones de guerrilleros y criminales,
Bogotá.- El presidente de Colombia, Iván Duque, anunció que conformó una comisión independiente para revisar los manuales y protocolos operacionales de las Fuerzas Militares y de la Policía Nacional, que deberá certificar si respetan las normas de derechos humanos y de Derecho Internacional Humanitario.
La decisión del mandatario se produjo casi una semana después de que el diario estadounidense New York Times dijo en un informe que el comandante del Ejército colombiano ordenó duplicar el número de muertes en combate, capturas y rendiciones de guerrilleros y criminales, aumentando los riesgos para la población civil, versión que fue negada por los militares.
"He decidido conformar una Comisión Presidencial independiente, que haga un análisis riguroso de todas las órdenes, manuales y documentos operacionales", dijo el presidente en un acto de gobierno.
Unos 400.000 efectivos de las Fuerzas Militares y la Policía Nacional combaten a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), a las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que rechazaron un acuerdo de paz firmado en 2016 y a bandas criminales formadas por exparamilitares de ultraderecha.
Efectivos de las Fuerzas Militares han sido acusados en el pasado por organizaciones como Human Rights Watch de violaciones a los derechos humanos y de complicidad con escuadrones paramilitares, grupos ilegales armados que surgieron en la década de 1980 para combatir a la guerrilla izquierdista.
Decenas de militares fueron capturados y sentenciados por violaciones a los derechos humanos.
Duque reiteró que en su gobierno no se tolerarán violaciones a los derechos humanos por parte de efectivos de las Fuerzas Militares y recordó que "quien esté en la Fuerza Pública y cometa un delito y deshonre el uniforme le deberá caer siempre todo el peso de la Ley. En eso no hay duda alguna".
Pese a que la intensidad del conflicto de más de medio siglo -que ha dejado 260.000 muertos- se redujo tras la firma del acuerdo con las FARC en 2016, otros grupos armados ocuparon el territorio abandonado por la guerrilla para actividades de narcotráfico y minería ilegal.