Duque objetó seis de los 159 artículos de la ley sobre el funcionamiento y las competencias del tribunal encargado de investigar, juzgar y sentenciar a los responsables del conflicto con las FARC.
Bogotá.- El presidente de Colombia, Iván Duque, llevó este viernes un mensaje de tranquilidad a más de un centenar de excombatientes de las FARC que avanzan en su reintegración a la sociedad y dijo que las objeciones a una ley clave para implementar el acuerdo de paz no interferirán en su proceso.
Duque objetó seis de los 159 artículos de la ley sobre el funcionamiento y las competencias del tribunal encargado de investigar, juzgar y sentenciar a los responsables de los crímenes ocurridos en medio del conflicto con las izquierdistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y la devolvió al Congreso para que la ajuste.
La decisión del mandatario despertó protestas de excomandantes rebeldes que alegan un incumplimiento del pacto firmado en 2016 y que temen un vacío jurídico que empuje a excombatientes a regresar a la violenta confrontación.
"Las objeciones que hemos formulado, en uso de una facultad constitucional, nada van a afectar a esas personas que están en ese proceso de reincorporación", dijo el presidente al visitar un Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación ubicado cerca al municipio de La Paz, en el departamento del Cesar, al norte del país.
"Todas las personas, absolutamente todas las que están en el proceso de reincorporación, pueden tener la absoluta tranquilidad de que nosotros queremos hacer el mayor esfuerzo por el éxito de ustedes, para que puedan hacer esa transición exitosa a esas fuentes de ingresos, fuentes de trabajo", agregó.
Duque visitó los proyectos productivos de los excombatientes y compró un par de botas fabricadas en un taller de un desmovilizado por las que pagó US$45.
Bajo los términos del acuerdo de paz, unos 13.000 integrantes del desmovilizado grupo rebelde, incluidos casi 7.000 excombatientes, abandonaron las armas y conformaron el partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común como parte de su reintegración a la sociedad. Ocho de los excomandantes de las FARC ocupan curules en el Congreso.
Colombia aún está dividida entre quienes apoyan la llegada a la política de las FARC después de un acuerdo de paz sellado y los sectores más conservadores, que quieren ver a los excombatientes tras las rejas por haber participado en la violenta confrontación que ha dejado 260.000 muertos en más de cinco décadas.