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Presidente de Uruguay inicia su último año de gestión
Jueves, Marzo 6, 2014 - 16:41

Según analistas, la gestión efectiva de José Mujica terminó y de ahora en adelante sólo se dedicará a apagar "incendios" o abrochar algún gran proyecto que inaugure el próximo gobierno.

Montevideo. Con un buen nivel de aprobación popular y una creciente proyección internacional, el presidente uruguayo, José Mujica, comenzó esta semana su último año de gobierno.

Según analistas, la gestión efectiva de Mujica terminó y de ahora en adelante sólo se dedicará a apagar "incendios" o abrochar algún gran proyecto que inaugure el próximo gobierno.

Es que 2014 es un año electoral en el que se elegirá a su sucesor.

En elecciones abiertas, los partidos definirán en junio a sus candidatos a la presidencia para la contienda de octubre que, eventualmente, puede derimirse en una segunda vuelta en noviembre.

El sueño de Mujica es entregar la banda presidencial el 1 de marzo de 2015 a su compañero de la coalición izquierdista Frente Amplio (FA) y antecesor en el cargo, Tabaré Vázquez.

Despedida. Para el politólogo y director de la consultora Factum, Oscar Bottinelli, este año "queda sumido a la campaña electoral" y "el protagonismo del gobierno se va a dar en grandes problemas que haya".

"Es tiempo de hacer anuncios, de manejar grandes proyectos, de señalar idealidades como gobierno y conducción se terminó", indicó.

Bottinelli dijo a la radio local que en estos 12 meses resta para el gobierno "terminar de ejecutar lo que esté en marcha y a lo sumo dar el puntapié a algún proyecto como por ejemplo el tema de 'Aratirí'".

Aratirí es una polémica iniciativa de explotación de yacimientos de hierro a cielo abierto que colocaría al país como el octavo productor mundial del mineral, pero que recoge fuerte rechazo en productores rurales y ecologistas.

Como punto alto de la gestión, Bottinelli mencionó iniciativas como la despenalización del aborto, la legalización de la marihuana, los avances en políticas sociales y la continuidad de la bonanza económica.

Entre las flaquezas que percibe la opinión pública, señaló las dificultades del gobierno para resolver la inseguridad pública y los malos resultados de la enseñanza, así como el desprolijo cierre de la aerolínea de bandera Pluna.

Pese al desgaste en el poder, el mandatario conserva un respaldo alto en la ciudadanía.

Una encuesta de la consultora Cifra reveló que el nivel de popularidad de Mujica había crecido en febrero hasta un 54 por ciento, desde un 49% en noviembre. La aprobación por la gestión, en tanto, aumentó de 44 a 47%.

"Puede ocurrir que haya algún 'efecto verano' que hace que los juicios de los uruguayos se vuelvan un poco más benevolentes", especuló al comentar el sondeo el director de Cifra, Luis Eduardo González.

El nivel promedio de simpatía por la figura de Mujica en 2010 fue de 67%, cayó a 49 en 2011 y 48 en 2012 y subió a 49% en 2013.

Este ex líder guerrillero de 78 años no puede aspirar a la reelección inmediata, de acuerdo con la Constitución. Capítulo aparte merece la proyección internacional de su figura.

La austeridad de Mujica hizo que la prensa internacional lo calificara como el presidente más pobre del mundo.

Despojado de bienes suntuarios, vive en una modesta granja en las afueras de Montevideo y dona el 90% de su salario a su partido y organizaciones benéficas.

"Yo no soy pobre. Pobres son los que precisan mucho para vivir, esos son los verdaderos pobres, yo tengo lo suficiente", aclaró Mujica en mayo en una entrevista con Xinhua.

Incluso, el nombre del mandatario fue propuesto como candidato al Premio Nobel de la Paz 2014 por legisladores del FA y un grupo de académicos alemanes.

Por otra parte, según versiones de prensa, es candidato para liderar la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) desde el año próximo.

Futuro. A nivel de partidos, el FA mantenía en febrero una intención de voto del 44%, idéntico nivel de diciembre, de cara a las presidenciales de octubre, según una encuesta de Equipos Mori.

El principal rival del oficialismo es el partido Nacional (PN), con un 26% de las preferencias, seguido por el Colorado (PC), con 14%.

"El escenario ha sido extremadamente estable en los últimos años", resumió el director de Opinión Pública de Equipos, Ignacio Zuasnabar.

Recordó que en diciembre de 2011 el FA tenía el 42% de las simpatías del electorado, el PN el 22% y el PC el 15.

Para las elecciones internas de junio el amplio favorito en el FA es Vázquez (con un 89% de intención de voto).

Lejos de mantenerse al margen de la disputa electoral, Mujica expresó su preferencia por la candidatura de su antecesor, cosechando críticas de injerencia desde la oposición y de la otra precandidata del FA, la senadora Constanza Moreira.

"No tengo empacho en decir que espero que mi compañero Tabaré Vázquez sea el futuro presidente", sostuvo Mujica semanas atrás.

Para el gobernante, "el factor experiencia es fundamental en la conducción y en la actual coyuntura será invalorable para Tabaré" y a la sociedad "no le convienen los experimentos".

Vázquez, de 74 años, encabezó el primer gobierno del FA entre 2005 y 2010.

Luego se defendió y señaló que "el presidente tiene derecho a decir lo que piensa como cualquier uruguayo".

La Constitución impide al jefe de Estado involucrarse en la política partidaria.

Mujica encara este año decidido a cerrar varios proyectos a nivel de infraestructura y energía como la recuperación del ferrocarril y la construcción de una planta regasificadora.

Además, apunta al comienzo de la exploración minera por parte de Aratirí y a sentar las bases del proyecto de un puerto de aguas profundas en el océano Atlántico.

Antes del primer Consejo de Ministros celebrado en enero les anunció a sus colaboradores que 2014 "será el año en que tendrán que trabajar más que nunca" para plasmar "cuestiones estratégicas del país".

"Voy a gobernar hasta el último día si estoy vivo", puntualizó en ese entonces.

Autores

Xinhua