El Congreso dominado por el partido de Fujimori forzó el jueves la renuncia del ministro de Educación Jaime Saavedra por acusaciones de presunta corrupción en su portafolio, desafiando al presidente que había defendido su permanencia en medio de una importante reforma educativa.
Lima. El presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski y la líder opositora Keiko Fujimori aceptaron reunirse en los próximos días en un encuentro mediado por la Iglesia Católica, en busca de echar paños fríos a un enfrentamiento entre el Gobierno y el Congreso que derivó en la destitución de un ministro clave.
El Congreso dominado por el partido de Fujimori forzó el jueves la renuncia del ministro de Educación Jaime Saavedra por acusaciones de presunta corrupción en su portafolio, desafiando al presidente que había defendido su permanencia en medio de una importante reforma educativa.
"Quiero informar al país con mucha alegría que el mismo día de ayer (jueves) me han confirmado su aceptación tanto el presidente Kuczynski como la señora Fujimori a esta iniciativa que formulé", dijo el viernes el cardenal conservador Juan Luis Cipriani.
Kuczynski confirmó después que espera reunirse con Fujimori, aunque aún no se ha fijado el día del encuentro.
"Es una buena respuesta de ambos, lo que les dije es que yo brindo mi casa y el clima de confianza, espero que todo vaya bien", afirmó Cipriani en una entrevista con la radio local RPP.
El Gobierno espera que la salida de Saavedra marque el fin de una crispación con la oposición después de que el presidente Kuczynski dio marcha atrás en su amenaza de convertir la censura del Congreso en un voto de respaldo a su primer ministro.
Si el Congreso rechazaba al primer ministro, Kuczynski hubiera tenido que cambiar a todo su gabinete.
Keiko Fujimori, hija del ex presidente Alberto Fujimori -quien cumple una condena de 25 años de prisión por acusaciones de corrupción y violación a los derechos humanos-, perdió en junio la elección presidencial frente a Kuczynski.
El anuncio de la reunión entre ambos lideres se conoció luego de que el Gobierno informó que declaró "inadmisible" una nueva solicitud de indulto para el ex presidente, presentada por un ciudadano, debido a que no cumplió con el requisito legal de tener la firma de Fujimori.
No estaba claro si el pedido, presentado a fines de noviembre, tenía la autorización de la familia de Fujimori.
La censura de Saavedra fue otra señal de la constante inestabilidad política en el país minero cuya economía ha tenido el más rápido crecimiento de América Latina.
"Se estaba generando un bloque, un hielo, un vacío innecesario y dañino y era conveniente ver la forma de hacer que se juntaran respetando tiempos", dijo el Cardenal Cipriani.
