Desde el palacio presidencial, el recién asumido mandatario anunció la iniciativa que busca modernizar el sistema de Extranjería, bajo la idea de "fronteras abiertas" pero sin descuidar una migración segura y procesos más agiles de expulsión.
Santiago. El presidente Sebastián Piñera envió este lunes al Congreso un proyecto de ley para regular futuros flujos migratorios hacia Chile, mediante la diferenciación de visas, luego de que la población extranjera más que se duplicó en los últimos cuatro años.
En una ceremonia en el palacio presidencial, el recién asumido mandatario anunció que se modernizará el sistema de Extranjería y que se regularizará de manera gradual la situación de unos 300.000 extranjeros.
"Ha llegado el momento de poner orden en este hogar que compartimos, en esta casa que es la casa de todos", dijo Piñera en el acto de firma del proyecto que busca reemplazar una legislación vigente desde 1975.
De acuerdo al mandatario, se debe equilibrar el legítimo derecho del Estado a normar el ingreso y permanencia de extranjeros con el respeto a los derechos y deberes fundamentales de las personas.
En esa línea, el mandatario dijo que un decreto normalizará a todos los extranjeros que permanezcan en situación ilegal y que ingresaron a la nación antes del 8 de abril, pero con la condición de que no tengan antecedentes penales en su país de origen o en Chile.
Además, afirmó que el proyecto en su conjunto debe atender "la mitigación de los riesgos asociados al movimiento de personas, combatiendo la inmigración irregular y reprimiendo las actividades delictuales en nuestras fronteras", como el tráfico de inmigrantes.
Chile, uno de los países más estables de América Latina y con el mejor grado inversión de la región, ha registrado una expansión de más del doble de su población extranjera desde el 2014, liderada por flujos migratorios procedentes de Haití, Venezuela y Colombia.
Desde mediados de abril, se exigirá una visa consular de turismo a todos los ciudadanos haitianos que ingresen al país y su extensión será de un mes. También se ofrecerá una visa de 12 meses para fines humanitarios a aquellas personas que hayan solicitado este documento en el consulado chileno en ese país.
En el caso de los ciudadanos venezolanos, "y tomando en consideración la grave crisis democrática por la que actualmente atraviesa Venezuela (...) se crea una visa de Responsabilidad Democrática, la que deberá ser solicitada en el consulado chileno en Caracas, y se otorgará un permiso de residencia temporal de un año prorrogable por una vez", dijo Piñera.
Según el Gobierno, las medidas -que incluyen propuestas contenidas en un proyecto del gobierno anterior- apuntan a mejorar la calidad de vida de los extranjeros, facilitando su inserción y desarrollo de capacidades.
De acuerdo a datos recopilados por el Gobierno, en Chile residen casi un millón de migrantes, que representan un 5,5% del total de la población.
En el país, las mayores colonias de migrantes provienen de Perú, Colombia, Bolivia, Venezuela, Haití y Argentina.