Hebe de Bonafini fue procesada en un caso de fraude al Estado por un desvío de US$12,8 millones en el programa "Sueños compartidos" de viviendas sociales. Dijo tener "la conciencia muy tranquila".
Tras haber sido procesada el lunes (15.05.2017) en una causa en la que se investiga presunto fraude al Estado, la presidenta de la asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, dijo tener la "conciencia muy tranquila" y que la medida es un "honor" viniendo de este Poder Judicial y del actual Gobierno.
"Estoy honradísima de ser procesada por este Poder y por este Gobierno. Gracias Macri por darme este honor de ser procesada", manifestó De Bonafini en un vídeo difundido anoche, horas después de que la noticia de su procesamiento le llegó, según aseguró, por "la prensa".
"Tengo la conciencia muy tranquila", agregó, e incidió en que las integrantes de la organización de derechos humanos tienen "las cosas muy claras", saben dónde "está el enemigo" y continuarán señalándolo.
"Sabemos que el Poder Judicial, sobre todo el que tenemos ahora y el de la dictadura, no son la Justicia", expuso.
Para la presidenta de las Madres, este es el "precio" que tienen que pagar por decir que el actual presidente, Mauricio Macri, es su "enemigo", por denunciar que "él" y los miembros del Ejecutivo "fueron partícipes de la dictadura (1976-1984) con sus empresas" y por mantenerse fieles al proyecto "nacional y popular" del peronismo kirchnerista.
"Las Madres hemos siempre sido muy perseguidas y no es por casualidad que nosotros elegimos la calle para darnos a conocer para que aparecieran nuestros hijos. Primero fuimos muy agredidas de todas maneras, tratándonos de madres terroristas...(...) Muchas veces fuimos presas", recordó.
"Nunca dejamos de pelear ni de luchar, sabemos el precio que tiene la libertad (...) Las Madres decidimos jugarnos la vida por la libertad de la misma manera que se la jugaron nuestros hijos", prosiguió.
Acusación de desvío de fondos públicos. El magistrado federal Marcelo Martínez de Giorgi procesó el lunes a De Bonafini, de 88 años, en calidad de partícipe necesaria de un delito de defraudación a la administración pública por administración fraudulenta.
El caso investiga un supuesto desvío de más de 200 millones de pesos argentinos (unos US$12,8 millones) en el programa "Sueños compartidos", plan estatal impulsado por el Ejecutivo de Cristina Fernández (2007-2015) para la construcción de viviendas sociales y administrado por la fundación de Madres de Plaza de Mayo.
En la causa también están implicados, entre otros, los apoderados de la fundación -los hermanos Sergio y Pablo Schoklender- y el ya detenido ex secretario de Obras Públicas José López (2003-2015).
"Las Madres procesadas, Hebe procesada. Yo quiero que se fijen cuánto creció el patrimonio de todos los que estamos en este proceso. Y que se fijen en mi patrimonio, que vivo siempre en la misma casa y no tengo ni bicicleta", instó la activista en el vídeo.
