Bahamas, donde viven hasta 50.000 haitianos, la mayoría en condición irregular, lanzó a principios de noviembre una nueva ley de migración que establece nuevas condiciones para la permanencia de extranjeros en el país.
Santo Domingo. República Dominicana acusó este jueves a la Comunidad del Caribe (Caricom) de aplicar políticas migratorias que violan los derechos humanos en sus propios países, en respuesta a la preocupación del organismo sobre un plan de regularización de extranjeros que ejecuta el gobierno dominicano.
El ministro dominicano de Interior y Policía, José Fadul, dijo que las "desafortunadas exigencias" que hace el Caricom no se corresponden con la realidad, ya que a los extranjeros se les otorgó una prórroga para que pudieran acogerse al programa.
El bloque regional dijo este lunes que el plan que llevan a cabo las autoridades dominicanas amenazan con la deportación de miles de inmigrantes haitianos y de sus descendientes radicados en este país.
El Caricom agregó que el gobierno dominicano decidió no extender el plazo para la regularización de extranjeros indocumentados en su territorio, pese a que sólo 6.937 personas se inscribieron en el programa, "número muy inferior" con respecto a las más de 100.000 personas que son "vulnerables a la expulsión".
"Ellos (el Caricom) están deportando de manera sumaria a los haitianos, no les permiten la entrada, entonces yo no entiendo con qué moral, con qué calidad hablan ellos, cuando son los primeros que aplican medidas migratorias muy rígidas y desconsideradas con el hermano pueblo haitiano", dijo hoy el ministro dominicano.
Fadul agregó que a diferencia de los países que conforman al Caricom, República Dominicana cuenta con un Plan de Regularización de Extranjeros en Situación Irregular "que se aplica abiertamente a todos los inmigrantes que están en el país".
"Por primera vez en la historia un plan de regulación migratoria es gratuito en el mundo, gracias al presidente Danilo Medina que ha entendido esa necesidad, con lo que ha dado un gesto más que solidario que no es usual en ese tipo de programas", dijo el funcionario.
Este mismo miércoles, el gobierno de Haití condenó "enérgicamente los actos discriminatorios" contra sus ciudadanos radicados en Bahamas, cuyo gobierno impuso el año pasado una reforma drástica a sus políticas migratorias.
Olicier Pieriche, ministro de Haitianos Residentes en el Exterior, una cartera dedicada exclusivamente a la diáspora haitiana, llamó a las autoridades bahameñas a respetar los derechos de sus compatriotas y las pidió adoptar "todas las medidas necesarias para proteger la vida e integridad de los inmigrantes haitianos".
Bahamas, donde viven hasta 50.000 haitianos, la mayoría en condición irregular, lanzó a principios de noviembre una nueva ley de migración que establece nuevas condiciones para la permanencia de extranjeros en el país, como el hecho de que sólo los hijos de inmigrantes legalmente en ese país podrán obtener permisos de residencia, de escolaridad y de trabajo.
Trinidad y Tobago, otro integrante del Caricom, también ejecuta un riguroso plan para poner freno a la inmigración ilegal, que conllevaría a la expulsión de más de 110.000 indocumentados que viven en ese país, según el ministro trinitense de Seguridad Nacional, Gary Griffith.
En noviembre del 2013, el Caricom suspendió las negociaciones de ingreso de República Dominicana a ese organismo, en rechazo a una sentencia del Tribunal Constitucional dominicano, que ese año negó la nacionalidad dominicana a una mujer nacida en este país de padres indocumentados haitianos.
Al respecto, la Mesa Redonda de los Países de la Mancomunidad en Republica Dominicana, sugirió al gobierno dominicano retirar la solicitud de admisión sometida al bloque regional, debido a que "no tiene sentido ni político, ni económico para los intereses dominicanos, ser miembro activo del Caricom".
La presencia masiva de indocumentados haitianos es causa frecuente de fricciones entre ambas naciones que comparten la isla Hispaniola, en el centro del Caribe.
La Primera Encuesta Nacional de Inmigrantes de República Dominicana, difundida en el 2013, señaló que del total de extranjeros residentes en el país, 458.233 nacieron en Haití (87,3% de la población de inmigrantes radicados en territorio dominicano), y que otras 209.912 personas descendientes de padres haitianos nacieron en este país.
