"La nueva política de Relaciones Exteriores de la República Dominicana coloca en un primer orden el fortalecimiento de la participación y posicionamiento del país en el contexto regional", explicó el ministro de Relaciones Exteriores, Andrés Navarro.
Santo Domingo. La Cumbre Iberoamericana de Veracruz tiene una "singular importancia" para República Dominicana, ya que espera escenificar en ella su nueva política exterior y abordará los desafíos en materia de educación, cultura e innovación que suponen "tres aspectos fundamentales del desarrollo nacional".
"La nueva política de Relaciones Exteriores de la República Dominicana coloca en un primer orden el fortalecimiento de la participación y posicionamiento del país en el contexto regional", explicó el ministro de Relaciones Exteriores, Andrés Navarro, en una entrevista con EFE.
Navarro, que asiste por primera vez a una Cumbre Iberoamericana, abundó en que su país se encuentra en un proceso de reforma de su política de relaciones exteriores, a través de un Plan Estratégico de Desarrollo del Servicio Exterior.
Este plan, agregó, da prioridad al reposicionamiento del país en los espacios multilaterales, fortaleciendo su participación en los mismos y los mecanismos institucionales de seguimiento.
La XXIV Cumbre Iberoamericana, que se celebrará los próximos 8 y 9 en la ciudad mexicana de Veracruz, representa una oportunidad para reafirmar el compromiso de la República Dominicana con la agenda regional y el seguimiento a los acuerdos que se desprendan de la misma, según el canciller.
Navarro destacó que la República Dominicana espera que el diálogo y la coordinación multilateral fortalezcan la agenda de acuerdos comerciales y de cooperación en las relaciones bilaterales con otros países de Iberoamérica.
Consideró "muy acertada" la inclusión en la cumbre de foros empresariales y de comunicación, pues son "mecanismos -dijo- que facilitan que los acuerdos a nivel político puedan traducirse en programas de actuación más prácticos a la hora de concretar metas y resultados".
De hecho, opinó, es conveniente "seguir ampliando estos foros para incluir el ámbito social, a través del dialogo con organizaciones de la sociedad civil de Iberoamérica".
Navarro calificó de "decisión atinada" la realización bienal de las cumbres y valoró el papel de España como "un socio estratégico" en el plano comercial, de inversión y del desarrollo social.
El ministro reconoció que la inversión española en el comercio y en el turismo de la República Dominicana es una de las "más significativas", con la particularidad, agregó, de que los españoles generan arraigo en un país con profundos vínculos históricos.
"España sigue representando nuestro enlace mas fuerte con Europa, no solo en los aspectos comerciales sino también por la tradicional relación de cooperación para el desarrollo", dijo.
A su vez, remarcó el hecho de que miles de profesionales dominicanos se especializan en España en diversas áreas del conocimiento y de que el país europeo representa también una de las principales fuentes de remesa hacia República Dominicana.
Preguntado por el nuevo monarca español, Felipe VI, Navarro opinó que ha generado grandes expectativas en la República Dominicana, no solo por su renovado compromiso con América Latina, si no por su histórica relación con el país y su amistad con el presidente dominicano, Danilo Medina, "cultivada especialmente en los últimos años".