La puja entre el legislador y el ex mandatario se inició a raíz de que el congresista dijo que "en mí, Uribe no va a encontrar al Mogollón que Samper sí". Eso desató una 'tormenta' toda vez que desde Estados Unidos Uribe le llamó a reclamarle por tal declaración. Esto finalmente terminó en la recusación.
Bogotá. Una inesperada decisión se dio este este miércoles, alrededor del proceso que en contra del ex presidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez lleva la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes por las interceptaciones telefónicas (‘chuzadas’).
Se conoció que el coordinador de la investigación, el representante conservador de Tolima, Alfredo Bocanegra, dejó la indagación contra el ex mandatario.
Aunque su decisión no obedeció a amenazas, Bocanegra justificó su determinación en la búsqueda de independencia para poder adelantar varios debates de control político. “No renunciaré a mi independencia critica”, aseguró.
La puja entre el legislador y el ex mandatario se inició a raíz de que el congresista dijo que "en mí, Uribe no va a encontrar al Mogollón que Samper sí". Eso desató una 'tormenta' toda vez que desde Estados Unidos Uribe le llamó a reclamarle por tal declaración. Esto finalmente terminó en la recusación.
“Es una recusación malsana y malintencionada de un personaje como el doctor Jaime Lombana de quien considero que tiene cuatro en conducta y que pretende distraer el asedio de los medios respecto a sus relaciones con el grupo Nule”, sostuvo.
“Prefiero recuperar mi independencia critica en el Congreso para adelantar los grandes temas de control político a quedarme callado sobre el pretexto de que soy investigador de una de las tantas causas que se adelantan contra Uribe”, añadió.
Luego volvió a arreciar sus críticas al expresidente Álvaro Uribe Vélez. Negó que la totalidad del Partido Conservador sea tan “adepto” al exmandatario y señaló que su colectividad “puede ser leal pero no cómplice”.
“El partido debe buscar su propio rumbo, sus propios líderes, su propia identidad y su propio norte; no puede seguir atado al pasado por el afecto al doctor Uribe”, agregó.
Aunque no ha recibido amenazas, Bocanegra admitió varias presiones y criticó con contundencia al expresidente Uribe por la llamada que le hizo.
“No está bien que una persona que está siendo investigada llame a su investigador (…) qué pensarían si alguien que investigue la fiscal Viviane Morales la llama y le dice habla fulano”, manifestó.
Y recalcó: “en el país hay gente más papista que el Papa que podría considerar que le está haciendo un favor al expresidente Uribe si toma una actitud violenta en contra mío (…) yo carezco de un esquema de seguridad y tengo una sensación que no me genera seguridad”.