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Representante de la ONU: "la causa estructural del conflicto colombiano está en la desigualdad"
Domingo, Noviembre 4, 2012 - 17:16

El coordinador del Sistema de las Naciones Unidas en Colombia dijo que "es con la gente, a través del fortalecimiento de las redes comunitarias, del perdón, de la verdad, de la reparación, la forma de reconstruir el país bajo cimientos sólidos".

El coordinador del Sistema de las Naciones Unidas en Colombia, Bruno Moro, afirmó que "la paz hay que construirla desde las regiones", las más afectadas por el conflicto armado, en paralelo al diálogo formal que el Gobierno y las FARC mantendrán en Cuba.

Moro participó en la Mesa Regional de Paz organizada por el Congreso de Colombia en Pasto, donde los líderes sociales preparan sus propuestas para enviar a La Habana.

"Estamos convencidos de que un acuerdo de paz termina un conflicto pero no necesariamente lleva a la paz o elimina la violencia", aseveró sobre el diálogo entre el Gobierno y FARC, instalado el 18 de octubre en Noruega y que proseguirá en la isla caribeña.

Es por esa razón que el Congreso de Colombia solicitó a la ONU su apoyo para organizar las Mesas Regionales de Paz, que durante un mes se celebrarán en nueve regiones con el objetivo de elaborar un documento final.

"Nos involucramos porque el Congreso nos solicitó apoyarles en estas consultas a través de nuestra capacidad metodológica, experiencia en las regiones y en la logística; las Naciones Unidas lleva años trabajando en la construcción de la paz desde las regiones", matizó el funcionario italiano.

Según Moro, "el conflicto colombiano se ha desarrollado esencialmente en las regiones, allí están sus víctimas, se ha destruido el tejido social, se ha debilitado la capacidad institucional del Estado, se ha dado espacio al abuso del poder y al uso de la fuerza".

Trabajar la paz a través de las voces de sus líderes, campesinos, indígenas, afrodescendientes, mujeres, jóvenes y sindicalistas es "la forma de fortalecer el tejido social", remarcó, al considerar que "sin esto ningún acuerdo de paz puede tener capacidad de sostenerse".

A juicio de Moro, "es con la gente, a través del fortalecimiento de las redes comunitarias, del perdón, de la verdad, de la reparación, la forma de reconstruir el país bajo cimiento sólidos".

El funcionario de la ONU indicó que nos encontramos ante dos Colombias: una urbana, encabezada por lo que ocurre en Bogotá, y otra rural, la más afectada por el conflicto social y armado.

"Colombia es un país que por muchos sentidos se parece a ciertos países europeos, como España, un país de regiones. Cada región tiene su identidad, y aquí más, hay indígenas, afrodescendientes", expresó Moro.

E indicó que si se mira a Colombia desde Bogotá, "una gran capital internacional, de la cultura, ciudad intensa, viva, hay negocios, mucha inversión", uno se encuentra "al resto del país a otro nivel".

"Bogotá tiene capacidad de resolver conflictos por medio del Estado del derecho, en las regiones se resuelven con violencia, y los menos protegidos son los que más sufren, en este caso campesinos, mujeres", matizó, al calificar esta Colombia como "otro país".

Moro dejó claro que "la causa estructural del conflicto colombiano está esencialmente en la desigualdad", al matizar que la realidad es que su economía está creciendo, pero "crece también el coeficiente de exclusión, a lo que se suma un déficit de democracia".

"Una parte del conflicto puede achacarse a que la democracia no es accesible a todos", manifestó, al reclamar un "desarrollo más equitativo" en un país vulnerable por el conflicto pero también por los efectos del cambio climático.

"La paz se construye desde las regiones, por eso estamos aquí, en el departamento de Nariño, uno de los más afectados por el conflicto. Aquí están todos los actores armados", manifestó el representante de la ONU.

En Nariño, donde crece la mayoría de los cultivos ilícitos de coca en Colombia y es salida directa de la droga al Pacífico, confluyen guerrilleros, paramilitares, delincuentes, narcotraficantes y fuerzas de seguridad del Estado.

La Mesa Regional de Paz celebrada este sábado en Pasto reunió a líderes de este departamento y del vecino Putumayo, ambos fronterizos con Ecuador y entre los más violentos del país.

Autores

ELESPECTADOR.COM