En el plan de Gobierno que ofreció al electorado, Marina Silva propone limitar los créditos preferenciales que la banca estatal ofrece para la inversión privada en diversas áreas.
La presidenta brasileña y candidata a la reelección, Dilma Rousseff, calificó este sábado de "gravísimo" que una de las propuestas de su principal rival, la ecologista Marina Silva, sea eliminar los subsidios estatales a la actividad económica.
"Son propuestas aventureras, oscurantistas y atrasadas, que son parte de una oferta que parece avanzada, pero es profundamente demagógica y que, sobre todo, no se sabe a qué intereses sirve", declaró Rousseff en un acto de campaña con alcaldes del Partido de los Trabajadores (PT), que la postula para un segundo mandato.
En el plan de Gobierno que ofreció este viernes al electorado, Marina Silva, favorita en los sondeos para derrotar a Rousseff en una segunda vuelta de las elecciones de octubre próximo, propone limitar los créditos preferenciales que la banca estatal ofrece para la inversión privada en diversas áreas.
Según Rousseff, esos "subsidios" favorecen planes de construcción de viviendas populares, obras de infraestructura en transporte y en otras áreas, así como vastos programas de agricultura familiar que "simplemente acabarán" sin ese apoyo estatal.
También criticó la intención de Silva de restarle prioridad a la explotación de las reservas de petróleo y gas descubiertas en aguas profundas del océano Atlántico por la estatal Petrobras.
"Si se pone en práctica el programa de candidatos así, no sólo la Petrobras perderá importancia, sino que se restringirá la acción" de toda la banca pública, que según Rousseff, ha sido una de las armas de su Gobierno frente a la crisis global.
Así como hizo este viernes su vicepresidente, Michel Temer, la mandataria también condenó la idea de Silva de gobernar con "los mejores" de todos los partidos políticos, pero no con las propias formaciones.
"En una democracia, quien no gobierna con los partidos coquetea con el autoritarismo", afirmó Rousseff, quien este sábado participó en un acto de campaña en la ciudad de Jales, en el estado de Sao Paulo, en el que dio inicio a las llamadas "caravanas del PT", que movilizarán a miles de militantes durante este fin de semana.
Las caravanas de automóviles recorrerán sobre todo las ciudades con una población de menos de 30.000 habitantes, que según explicó a Efe el secretario nacional de Relaciones Institucionales del PT, Romenio Pereira, son las que más se han beneficiado con los planes sociales instrumentados por el Gobierno de Rousseff.
Marina Silva se convirtió en candidata del Partido Socialista Brasileño (PSB) para las elecciones del 5 de octubre hace quince días, tras la muerte del anterior abanderado, Eduardo Campos, en un accidente aéreo.
Su candidatura ha calado con una inesperada profundidad entre los electores y, según diversas encuestas, es favorita para derrotar a la actual presidenta y candidata a la reelección, Dilma Rousseff, en una segunda vuelta que se celebraría el 26 de octubre.