Desde la guerrilla interna, que mantuvo en vilo durante doce años al país, el ex-comandante llegó a la presidencia de El Salvador con el apoyo de las urnas.
San Salvador. El ex-comandante guerrillero Salvador Sánchez Cerén asumió hoy la Presidencia de El Salvador para un segundo mandato consecutivo de cinco años de la exguerrilla y ahora partido político FMLN.
La banda presidencial le fue impuesta a Sánchez Cerén por el titular del Parlamento salvadoreño, Sigfrido Reyes, quien le tomó la promesa constitucional, en la ceremonia oficial que se celebró en el Centro Internacional de Ferias y Convenciones (CIFCO), en San Salvador.
Reyes le quitó la banda al presidente saliente, Mauricio Funes, quien asistió al acto pese a que su madre murió el sábado, y se la impuso a Sánchez Cerén.
En el evento también fue juramentado el nuevo vicepresidente y también excombatiente guerrillero, Óscar Ortiz, quien durante cinco períodos consecutivos, desde 2000 hasta el año pasado, fue alcalde del municipio de Santa Tecla (centro).
Sánchez Cerén, de 69 años de edad, se convirtió este domingo en el primer excomandante guerrillero en asumir la Presidencia de este país centroamericano que sufrió 12 años de conflicto armado interno (1980-1992) entre la exguerrilla y el Ejército salvadoreño.
El nuevo presidente asumió el cargo para el período 2014-2019, el segundo consecutivo del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), en sustitución de Funes, de cuyo Gobierno Sánchez Cerén fue el vicepresidente.
En 2009, el ahora expresidente se convirtió en el primer mandatario de corte izquierdista de este país centroamericano al sacar del poder a la hoy opositora Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), que estuvo 20 años en el Gobierno.
Sánchez Cerén y Ortiz fueron ovacionados por los asistentes a su investidura.
"¡Sí se pudo, sí se pudo!", y "El pueblo unido, jamás será vencido", eran algunas de la frases que vitoreaban muchos de los asistentes entre aplausos.
En la investidura, que cuenta con la presencia de unas 6.000 personas, participa el príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, en representación de España.
También asisten los presidentes de Bolivia, Evo Morales; Ecuador, Rafael Correa; Costa Rica, Luis Gillermo Solís, y de la República Árabe Saharaui Democrática, Mohamed Abdelaziz.
Asimismo, están el presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, y el de República Dominicana, Danilo Medina.
Además, están presentes el primer ministro de Taiwán, Jiang Yi-huah; los vicepresidentes de Argentina, Amado Boudou; de Cuba, Salvador Valdés, de Perú, Marisol Espinoza; de Nicaragua, Ómar Halleslevens; de Venezuela, Jorge Arreaza, y el viceprimer ministro de Belice, Gaspar Vega.