Los socialistas, necesitan el apoyo del partido antiausteridad Unidas Podemos y de agrupaciones regionales más pequeñas para lograr la mayoría simple necesaria frente al bloque de centroderecha, que ha dicho que votará en contra de Sánchez.

Madrid. El socialista Pedro Sánchez se acercó este jueves a su segundo mandato como presidente del Gobierno español, después de que un partido separatista catalán dijo que podría facilitar el ajustado proceso de investidura con varias abstenciones.

El PSOE -el partido del presidente en funciones, Sánchez- fue la fuerza más votada en las elecciones generales del 28 de abril, pero no logró obtener suficientes escaños para gobernar en solitario, lo que lo obliga a depender de otros partidos para mantenerse en el poder.

Los socialistas, que lograron 123 de los 350 asientos de la Cámara baja, necesitan el apoyo del partido antiausteridad Unidas Podemos y de agrupaciones regionales más pequeñas para lograr la mayoría simple necesaria frente al bloque de centroderecha, que ha dicho que votará en contra de Sánchez.

Sin embargo, las cifras están muy ajustadas y Sánchez sólo podría ser investido si al menos un diputado se abstiene.

En este contexto, la diputada Laura Borrás, del partido separatista catalán Junts per Cat, dijo que los escaños obtenidos por tres de sus líderes -actualmente en prisión provisional- contarían como abstenciones en el proceso de investidura, mientras que los cuatro parlamentarios que sí pueden votar lo harán contra el líder socialista.

Se espera que el Congreso celebre las votaciones de investidura en julio. Si Sánchez no logra asumir un nuevo mandato tendrá que convocar nuevas elecciones generales.