“El tema de las drogas no debe ser ‘el tema’ de la Cumbre. Que se vaya a discutir, sí, porque esa es la voluntad de la inmensa mayoría de los países de vienen. Y lo que puede salir de aquí es el inicio de una discusión necesaria”, aseguró Santos.

Cartagena de Indias, Colombia. Una revisión a la actual política de lucha contra las drogas “es necesaria” y expresa la “voluntad de la inmensa mayoría” de los naciones participantes en la VI Cumbre de las Américas pero no debe centrar las discusiones del certamen, aseguró este miércoles en Cartagena de Indias, el presidente anfitrión, Juan Manuel Santos.

“El tema de las drogas no debe ser ‘el tema’ de la Cumbre. Que se vaya a discutir, sí, porque esa es la voluntad de la inmensa mayoría de los países de vienen. Y lo que puede salir de aquí es el inicio de una discusión necesaria”, aseguró Santos durante un encuentro informal con los periodistas en la sede del Museo Naval de Cartagena de Indias, acondicionado como Gran Sala de Prensa que atenderá a los 1.420 comunicadores acreditados para la cobertura de la VI Cumbre.

Colombia ha padecido por años el flagelo de la droga. Centroamérica está cada vez más invadida por el crimen organizado y, por eso, es muy necesario en este momento tomar el toro por los cachos e iniciar una discusión, solamente para ver si descubrimos que hay una mejor alternativa para atacarlo como comunidad internacional”, enfatizó.

“Espero que frente a esa discusión por lo menos se dé la alargada, luz verde y nada más. Aquí nadie va a venir con una posición de protesta sino con el deseo, simplemente, de iniciar una discusión que el mundo necesita”, concluyó.

En noviembre de 2011, en declaraciones al diario británico ‘The Guardian’, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, se declaró a favor de “abordar un nuevo enfoque” en la lucha global contra el narcotráfico.

Hace dos meses, el mandatario colombiano reveló que a pedido de varios gobiernos centroamericanos incluiría el tema de la política de lucha antidrogas como uno de los temas a debatir de la VI Cumbre de las Américas, de la que su país es anfitrión. La propuesta tuvo acogida por varias naciones Latinoamericanas e, incluso, por Estados Unidos, que aceptó que se abra el debate aunque ha reiterado su oposición a la posibilidad de legalización.

Además, Santos reveló entonces que su gobierno preparó una metodología para abordar el tema con sus pares del continente, durante el certamen.