Este viernes, el fiscal general y el ministro de Defensa confirmaron que pertenecía al ELN. Nunca hizo parte de las Farc, aclaró el ministro de Defensa, Guillermo Botero.
Horas después del atentado, el fiscal general de la Nación Néstor Humberto Martínez señaló a José Aldemar Rojas Rodríguez como el responsable de ingresar y activar el carrobomba que explotó a las 9:32 de la mañana del jueves 17 de enero en la Escuela General Santander, suroccidente de Bogotá, que ha dejado 21 víctimas fatales -incluido el propio Rojas Rodríguez- y 68 personas heridas. Y a primera hora este viernes, el fiscal reiteró que Rojas Rodríguez fue el responsable de la explosión en la escuela de cadetes de la Policía.
En la rueda de prensa conjunta que dieron con el director de la policía, general Óscar Atehortúa, el ministro de Defensa, Guillermo Botero, y el fiscal aseguraron que Rojas Rodríguez pertenecía al Ejército Nacional de Liberación (ELN) desde al menos 1994, guerrilla en la que se convirtió en un experto explosivista. En 1994, señalaron, era miliciano de este grupo guerrillero en Pueblo Nuevo, Arauca, departamento donde se registró en julio de 2018 la última revisión técnico mecánica de la camioneta que explosionó ayer en la escuela de cadetes de la Policía.
Según la información entregada por estos altos funcionarios del Estado, Rojas Rodríguez estuvo vinculado al frente Domingo Laín, al Adonay Ardila y al estado mayor del Frente de Guerra del ELN. Sus alias eran el Mocho (había perdido la mano derecha), Kiko o Culebro Viejo. En 2013, manifestaron, aparecía como la cabeza del Domingo Laín, cuyo fuerte son las operaciones bélicas en Arauca, en 2015 fue jefe de la comisiónCamilo Cienfuegos y en 2017, señaló un desmovilizado, se convirtió en jefe de inteligencia.
El ministro de Defensa aseguró también que Rojas Rodríguez trató de certificarse como desmovilizado de las Farc entre mayo y septiembre de 2017, solicitud que fue rechazada por los líderes de esa guerrilla. "Él nunca hizo parte de las Farc", expresó Botero.
Desde ayer, Martínez aseguró que Rojas Rodríguez ingresó a la institución en una camioneta gris, de placas LAF 565, del año 1993, y que, de acuerdo con el RUNT, la última revisión técnicomecánica a ese vehículo se hizo en Arauca el 27 de julio de 2018. La camioneta estaba a nombre suyo, la adquirió en mayo de 2018 por $25 millones, dijo esta mañana el fiscal. Se la compró a un particular que la había conseguido en Saravena (Arauca).
Según documentos oficiales, Rojas Rodríguez nació en Puerto Boyacá el 13 de mayo de 1962 y tenía la mano derecha amputada. El fiscal detalló que, después de la explosión en la escuela de cadetes de la Policía, cuando llegaron las autoridades para empezar a analizar la escena del crimen, su otra mano apareció en el campo de paradas. Con ella se recogieron pruebas necrodactilares que permitieron identificarlo.
Aunque en su lugar de residencia aparece la vereda del Boja, en Cubará, Boyacá; Rojas Rodríguez solicitó su cédula en Honda, Tolima. Y al consultar en las bases de datos de la Policía, no aparece con orden de captura vigente, pendientes con la justicia ni antecedentes judiciales.
El fiscal general reiteró que las pesquisas judiciales para esclarecer este atentado continúan y señaló que el vehículo estaba cargado con unos 80 kilos de pentolita, un explosivo de alto poder destructivo que resulta de la mezcla de resultado de TNT y pentrita. Así como suele usarse en implementos militares —como las ojivas—, se utiliza también, por ejemplo, en la elaboración de minas antipersonal improvisadas.
El presidente de la República, Iván Duque, anunció ayer que dio la orden inmediata a la Fuerza Pública para que despliegue todas las capacidades de inteligencia y determine "quiénes son los responsables de este cobarde ataque y prevengan cualquier acción criminal". Hasta ahora se sabe de dos capturas relacionadas con el atentado, una en Bogotá a un hombre llamado Ricardo Carvajal, cuyo arresto se va a legalizar en las próximas horas en los juzgados de Paloquemao, en medio de altas medidas de seguridad.