La presencia de los antisociales en suelo hondureño tendría como fin el de establecerse como una célula de un cártel mexicano de la droga, según inform,ación de un medio salvadoreño.
Los 13 mejores sicarios que integran la Mara Salvatrucha (MS-13) en El Salvador habrían sido enviados a Honduras para realizar actividades criminales, según una publicación del diario Salvador.com.
Alrededor de 60 mareros fueron entrenados en tácticas militares el pasado 9 y 10 de febrero pasados y los 13 mejores fueron enviados a Honduras, añade la publicación.
El denominado Grupo Especial para Operaciones Especiales de Barrio es dirigido por tres cabecillas que forman parte de un cártel mexicano, señala Salvador.com.
Se trata de un grupo armado con formación y entrenamiento militar que recibió el adiestramiento en una zona rural del municipio de San Alejo, en el departamento de La Unión, El Salvador, según las fuentes policiales y militares consultadas por el diario digital.
Menos de dos semanas después del entrenamiento, el grupo realizó otra sesión para recibir instrucciones de uso militar, en la comunidad de Quezaltepeque, departamento de La Libertad.
Según las instrucciones del grupo criminal, se debe "organizar un grupo de reacción de la "MSX3" contratar ex guerrilleros o ex militares resentidos. A ambos grupos pagarles y que capaciten homeboys (mareros) con estrategias militares. Es de aprovechar que esta gente se encuentra resentida", indica el diario.
Los mareros serían entrenados en tácticas de emboscada, escape y fuga, contraemboscada, contención de fuerzas enemigas, así como montaje y desmontaje de diversas armas. Estas habrían sido las primeras instrucciones de táctica militar que ex miembros de unidades especiales de la Fuerza Armada, desmovilizadas luego de los Acuerdos de Paz, y de actuales fuerzas especiales, impartieron a los 60 pandilleros de la MS-13 seleccionados de varias clicas a nivel nacional, según fuentes de inteligencia consultadas por el diario digital.
"La orden girada por los "12 apóstoles", o "Ranfla Nacional", esto es los 12 principales cabecillas, fue que eligieran a los mejores cuadros. Y eso hicieron. Por ejemplo, de la comunidad Iberia, en San Salvador, asistieron dos mareros; también llegaron dos de Apopa. Y así, de oriente, occidente.
Los mejores y más leales. "Los mareros que han dado suficientes pruebas de lealtad y con actitudes guerristas", cita el diario. Entre esos 60 también incluyeron 14 palabreros, es decir, 14 cabecillas jefes de clicas locales.
Los cabecillas de estas clicas habrían sido los encargados de contactar a los veteranos de guerra que fueron especializados en la década de los 80 para que entrenaran a sus miembros. Los mareros habrían hecho una oferta a los veteranos, que al igual que en Honduras se sienten abandonados por el Estado luego de haber arriesgado sus vidas, que era difícil de despreciar.
Entre los entrenadores de los mareros se encontrarían elementos activos del Ejército salvadoreño, según el Salvador.com.
"Así, el 9 de febrero, unos 20 vehículos todoterreno, entre camionetas Prado, Land Cruiser y pick ups doble cabina, desfilaron por el cantón Pavana, en San Alejo y se dirigieron hacia unos potreros de la zona. A bordo de los 20 automotores iba más de medio centenar de mareros, con 29 ó 30 fusiles en su mayoría, AK-47, incluyendo un cabecilla que supuestamente es de Apopa y que últimamente se ha asentado en una casa del cantón Pavana, quien se jacta de que en su pick up carga una hacha que usa para mutilar a sus rivales, mareros o policías o cualquier otra persona a la que se le tenga que ajustar las cuentas", indica la publicación.
Según las fuentes policiales, los mareros también están ligados al tráfico de droga y "quienes están tras la coordinación de esos traslados de drogas en el sector de Pasaquina y algunos sectores de San Alejo, ambos municipios fronterizos con Honduras, son dos hombres que por años han trabajado como sicarios del cartel de Los Perrones, una agrupación narcotraficantes, lavadores de dinero y contrabandistas del oriente salvadoreño".
El objetivo del entrenamiento militar a los mareros es el de establecerse ya como un satélite de un cártel mexicano y también para expandirse hacia Honduras, indica el diario.
"De hecho, las fuentes policiales indican que pocos días después de que recibieran el entrenamiento militar en San Alejo, del grupo de 60 fueron seleccionados los 13 mejores y éstos fueron llevados a Honduras para servir como guardaespaldas de un reconocido narcotraficante de ese país, a quien las fuentes sólo mencionan con el nombre de César", prosigue. El pasado 14 de marzo, la Policía Nacional detuvo a tres pandilleros de la "18" , en el departamento de Ocotepeque en el occidente de Honduras.
Las autoridades informaron que podrían estar ligados al crimen del regidor municipal de Sinuapa, Donny Rodríguez, crimen registrado el 8 de marzo.