La mayoría obtenida por el gobierno de centroderecha en la Cámara alta significó que había pocas dudas en la votación sobre una moción de confianza que se había convocado para subrayar su legitimidad. El gobierno ganó por 162 votos contra 135.
Roma. El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ganó este jueves una moción de confianza en el Senado, como se esperaba, antes de una votación en la Cámara baja que podría forzarlo a renunciar o dejarlo aferrado a una pequeña mayoría.
La mayoría obtenida por el gobierno de centroderecha en la Cámara alta significó que había pocas dudas en la votación sobre una moción de confianza que se había convocado para subrayar su legitimidad. El gobierno ganó por 162 votos contra 135.
Las acciones en la compañía de medios Mediaset, controlada por la familia Berlusconi, recuperó terreno y se volvieron positivas después de la votación inicial.
Pero el resultado fue sólo el primer paso en una confrontación que terminará con una moción de censura en la Cámara baja, esperada para las 1230 GMT.
Después de un año ensombrecido por escándalos sexuales y de corrupción y una agria disputa con su ex aliado Gianfranco Fini que le costó una mayoría parlamentaria segura, el día del Juicio Final ha llegado para Berlusconi después de dos años y medio en el poder.
El magnate de los medios de 74 años ha desafiado repetidamente a los escépticos, sobreponiéndose a una serie de deslices y escándalos para ganar tres elecciones y transformarse en el panorama político de Italia desde obtener el poder por primera vez en 1994.
Si pierde en la Cámara baja, tendrá que renunciar, dejando al presidente Giorgio Napolitano la tarea de designar un nuevo Gobierno o llamar a elecciones más de dos años antes de la fecha prevista en el 2013.
Después de una intensa campaña de acuerdos a puertas cerradas, en los que acusaciones de la oposición de compra de votos y corrupción han sido respondidas con feroces negativas y acusaciones de traición, muchos analistas estiman que el Gobierno podría conseguir los votos que necesita por un escaso margen.
Berlusconi exudaba su confianza característica antes de la votación en la Cámara baja. Cuando le preguntaron si creía que podría ganar, dijo a periodistas: "Sí, eso pienso".
Hay 630 diputados en la Cámara baja y Berlusconi necesita en teoría 316 votos para asegurarse una victoria. Pero el número real será menor debido a abstenciones o la ausencia de una integrante del opositor Partido Democrático, que está embarazada.
La policía antidisturbios cercó el centro de Roma para contener las esperadas protestas de miles de estudiantes y otros opositores al gobierno.