Los 80 cambios, que incluye jefaturas metropolitanas, regionales y departamentales, se dan apenas horas después de que el hijo del ex director de la Policía, comisionado general Ricardo Ramírez del Cid, fuera asesinado junto a sus dos guardaespaldas del escuadrón Cobras.

En medio de la creciente ola de crímenes que no ha podido ser frenada por el gobierno Lobo Sosa, las máximas autoridades de la Secretaría de Seguridad dieron a conocer 81 cambios en mandos intermedios de la Policía.

Estos cambios, que incluye jefaturas metropolitanas, regionales y departamentales, se dan apenas horas después de que el hijo del ex director de la Policía, comisionado general Ricardo Ramírez del Cid, fuera asesinado junto a sus dos guardaespaldas del escuadrón Cobras.

Durante el gobierno de Porfirio Lobo Sosa y Juan Orlando Hernández, más de 20.500 hondureños han muerto de forma violenta, según datos del Observatorio de la Violencia de la UNAH.

Esta vorágine de violencia mantiene al país con una tasa de homicidios de 85.5 por cada 100,000 habitantes, siendo la más alta del mundo.

En el 2009, al concluir el gobierno liberal, la tasa de homicidios era de 66.7 por cada 100,000 habitantes.

Y en el 2005, al concluir el gobierno de Ricardo Maduro, la tasa era de 37 por cada 100,000 habitantes.

Eso significa que en apenas siete años (gobiernos de Manuel Zelaya y Porfirio Lobo), la criminalidad casi se ha triplicado en el país.

Ante la ola criminal, el gobierno ha tomado medidas, sin embargo, ninguna de estas ha logrado reducir significativamente las muertes.

Hace dos semanas relanzó la estrategia de seguridad ciudadana con apoyo de las Fuerzas Armadas, sin embargo, las muertes han continuado, tanto en Tegucigalpa como Comayagüela y San Pedro Sula.

El propio director de la Policía, Juan Carlos Bonilla, admitió que será necesario hacer ajustes a la participación militar.

El vocero de Seguridad, Héctor Iván Mejía, fue el encargado de dar a conocer los nombres de los oficiales en sus nuevos cargos.

“Estos cambios se realizan con el propósito de dinamizar y profesionalizar el servicio policial a nivel nacional en los mandos de las diferentes unidades de la Policía Nacional”, dijo Mejía Velásquez.

Entre los cambios más significativos se destaca el del subcomisionado Leonel Sauceda Guifarro, quien se desempeñaba como jefe de la Metropolitana 2 de San Pedro Sula y ahora será el Director de la Academia Nacional de Policía (Anapo).

A Sauceda Guifarro lo sustituirá el también subcomisionado José Amílcar Mejía Rosales.

En tanto, Daniel Ferrufino Rodríguez, que se desempeñaba como jefe de la Departamental 15 en Olancho, será el jefe de la Policía Metropolitana 1 de Tegucigalpa y Comayagüela, en sustitución del subcomisionado Elvis Harold Bonilla Andara.

El director Juan Carlos Bonilla había advertido que los mandos intermedios y superiores serían evaluados en base a resultados.