El ministro de Exteriores de España, José Manuel García-Margallo, dijo este martes que “ahora no hay certeza de que se trate de un secuestro o esté retenida contra su voluntad”.

El ministro de Exteriores de España, José Manuel García-Margallo, dijo este martes que ahora existe incertidumbre sobre la real situación en la que se encuentra la periodista hispano-colombiana Salud Hernández, desaparecida el sábado 21 de mayo en una zona fronteriza entre Colombia y Venezuela, cuando realizaba un reportaje. La profesional trabaja para los periódicos El Tiempo de Colombia y El Mundo de España.

Durante un receso en la cumbre humanitaria mundial de la ONU que se realiza en Estambul, García-Margallo dijo a la prensa que la periodista avisó a familiares de que iba a estar inubicable algunos días. “Existen dudas sobre lo que pasa. Ahora no hay certeza de que se trate de un secuestro o que esté retenida contra su voluntad. Ella avisó a familiares que iba a entrar en una zona sin cobertura y que iba a estar (allí) un tiempo”.

El segundo dato que avala esa tesis, continuó el jefe de la diplomacia española, es que no ha habido reivindicación de ningún secuestro, algo que aseguró “no es frecuente” en grupos armados. Aunque recordó que la primera sospecha, que él mismo dio a conocer el lunes, fue el Ejército de Liberación Nacional (ELN), García-Margallo dijo que no hay reivindicación por parte de este grupo armado.

La buscan, por si está retenida. Por su parte, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dijo que la fuerza pública de su país realiza todos los esfuerzos para dar con el paradero de la profesional, “si es que está retenida”. El mandatario dijo el lunes 23 de mayo, durante un discurso en Bogotá, que “le he dado la instrucción a la fuerza pública, a nuestros generales, comandantes de todas las fuerzas y al director de la Policía, que tienen que desplegar todos los esfuerzos necesarios para ubicarla y retornarla a la libertad”.

Santos aseguró que ningún grupo armado ha reivindicado el secuestro de Hernández y que el gobierno no tiene información de si la periodista realmente está retenida contra su voluntad. El rastro de la corresponsal se perdió el sábado, cuando fue vista por última vez en el municipio de El Tarra, departamento de Norte de Santander. Allí se encontró con un hombre que le habría dicho que le serían devueltos materiales que le requisaron las fuerzas irregulares el día viernes.