"Aunque nuestra economía no ha sido el centro de la noticia esta semana, no pasa un día en que no esté preocupado por nuestros empleos, nuestras esperanzas y sueños", expresó el mandatario.
Washington. El presidente Barack Obama pasó el sábado de la euforia nacional por la muerte del mayor enemigo de Estados Unidos a encarar la gran amenaza que los altos precios de la gasolina y el desempleo representan a sus aspiraciones de ser reelecto en el 2012.
Seis días después de anunciar que fuerzas especiales dieron muerte al líder del Al Qaeda, Osama bin Laden, el presidente ofreció un sobrio mensaje en su discurso semanal por radio e internet, indicando que estaba consciente de que muchos estadounidenses aún pasaban por duros momentos.
"Aunque nuestra economía no ha sido el centro de la noticia esta semana, no pasa un día en que no esté preocupado por nuestros empleos, nuestras esperanzas y sueños", expresó.
El enojo público por los altos precios de la gasolina ha aumentado la presión para que Obama busque formas de aliviar a los consumidores, mientras intenta impulsar su campaña por la reelección en el 2012.
Los niveles de aprobación de Obama se elevaron tras la noticia de la muerte de bin Laden durante una incursión estadounidense en un complejo de Pakistán.
Pero antes de una posible reelección en el 2012 el mandatario demócrata también tendrá que lidiar con temas mucho más cercanos a Estados Unidos, como el costo de la gasolina y la percepción de seguridad laboral.
Los precios promedio de la gasolina se encuentran a casi US$4 el galón en todo el país, por encima de poco más de un dólar que se pagaba hace un año, y son un riesgo potencialmente serio para el futuro político de Obama.
Opositores republicanos dicen que Obama podría ser vulnerable a los comicios del próximo año si los precios de la gasolina se sitúan por sobre los US$5 dólares el galón, mientras la economía aún está frágil.
Como recordatorio, el desempleo estadounidense se elevó el mes pasado a 9,0%, desde el 8,8% de marzo, según información publicada el viernes, aunque se generaron muchos más nuevos empleos de lo esperado.
Analistas dicen que los altos precios de la gasolina socavan el poder de consumo interno y podrían evitar que las compañías contraten a más trabajadores.
Obama, que grabó su mensaje para el sábado desde una planta de auto-partes de Indiana que visitó el viernes, dijo que ayudará a los estadounidenses a distanciarse del costoso petróleo extranjero y que el actual precio de la gasolina era una pesada carga.
"A largo plazo, la única forma en que podemos evitar ser rehenes de los altos y bajos de los precios del petróleo es si reducimos nuestra dependencia del crudo. Eso requiere invertir en fuentes de energía limpia y alternativa", sostuvo Obama.