Donald Trump relevó a la hasta ahora fiscal general en funciones, Sally Yates, por haber ordenado a todos sus subordinados que no defendieran en los tribunales el polémico veto del magnate a refugiados e inmigrantes.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, despidó a la actual fiscal general del país, Sally Yates, quien dijo este lunes que no defenderá la orden ejecutiva sobre inmigración, informó la Casa Blanca.
"Yates traicionó al Departamento de Justicia al negarse a hacer cumplir una orden diseñada para proteger a los ciudadanos de Estados Unidos", apuntó la Casa Blanca en un comunicado.
A la espera de Jeff Sessions
Yates es una fiscal de la era del ex presidente Barack Obama y estaba en el cargo a la espera de que el Senado estadounidense confirme al nominado de Trump para la Fiscalía General, el senador republicano Jeff Sessions.
El comunicado de la Casa Blanca la criticó por ser "débil en las fronteras y muy débil en inmigración legal". Trump nombró en su reemplazo a Dana Boente, fiscal del distrito este de Virginia, hasta que Sessions sea confirmado. Boente dijo sentirse honrada de servir a Trump como fiscal general interina y que "defenderá y hará cumplir las leyes de nuestro país para asegurar que nuestro pueblo y nuestra nación estén protegidas".
Justiica y defensa de lo correcto. Sally Yates dijo en la noche del lunes que el Departamento de Justicia no defendería en los tribunales el decreto de Trump que suspendió durante 120 días el ingreso de refugiados al país, prohibió por tiempo indefinido la entrada de refugiados sirios y frenó por 90 días los viajes de ciudadanos de Irán, Irak, Libia, Somalia, Sudán y Yemen.
Yates dijo que no creía que defender el decreto fuese "coherente con la obligación solemne de esta institución de buscar siempre la justicia y defender lo correcto".
Horas después, fue despedida.
Trump ha dicho que se requiere de una revisión más estricta de los antecedentes de los inmigrantes para proteger a Estados Unidos de ataques terroristas, pero sus críticos se quejan de que su decreto se enfoca injustamente en los musulmanes y ensucia la reputación histórica del país como un lugar abierto a los inmigrantes.
Yates, quien fue nombrada por el ex presidente demócrata Barack Obama, estaba a escasos días de ser reemplazada por el nominado de Trump para liderar al Departamento de Justicia, el senador republicano Jeff Sessions, que espera la confirmación del Senado.
"La señora Yates es una persona designada por el Gobierno de Obama que es débil en las fronteras y muy débil en la inmigración ilegal", dijo la Casa Blanca en un comunicado.
La Casa Blanca dijo que Dana Boente, fiscal por el Distrito Este de Virginia, ejercerá como el Fiscal General interina de Estados Unidos hasta que Sessions reciba la aprobación del Congreso.
Boente dijo en una entrevista con el diario Washington Post que hará cumplir el decreto sobre inmigración.
* Con información de DW y Reuters.