“Si no se logra resolver pacíficamente y Rusia no da pasos para rebajar la tensión, habrá consecuencias de largo alcance en una amplia gama de áreas económicas”, dijo el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.
Santiago. Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) instaron este jueves a preparar nuevas medidas restrictivas contra Rusia que afecten al ámbito económico si no se logra una resolución pacífica de la crisis ucraniana y Moscú no da pasos para rebajar la tensión.
“Si no se logra resolver pacíficamente y Rusia no da pasos para rebajar la tensión, habrá consecuencias de largo alcance en una amplia gama de áreas económicas”, dijo el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en una rueda de prensa al término de la cumbre de líderes comunitarios.
“Pedimos a la CE y a los Estados miembros preparar posibles medidas específicas”, declaró el presidente del Consejo Europeo, que también señaló que la primera y segunda fase de sanciones decididas en los últimos diez días contra Moscú “ya están teniendo un efecto en el clima de inversiones de Rusia”.
Van Rompuy subrayó también que esas sanciones no son represalias, sino una herramienta de la política exterior, “no son una meta en sí mismas sino un medio para un fin”.
“La meta es que Rusia detenga su acción contra Ucrania para restaurar la soberanía de Ucrania, y para alcanzar esto necesitamos una solución negociada”, que, dijo, Europa está dispuesta a facilitar.
Van Rompuy también urgió a alcanzar un rápido acuerdo para enviar una misión de la OSCE a Ucrania, y señaló que los líderes han pedido a la jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton, que diseñe “rápidamente un plan para la contribución europea a fin de facilitar el trabajo de esa operación”.
“En ausencia de una misión creíble de la OSCE en los próximos días, la UE lanzará una misión europea”, declaró el político belga, que también afirmó que la UE tiene una responsabilidad especial con la paz y estabilidad en Europa y que están actuando acorde con los valores e intereses europeos.
Por su parte, el presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, aseguró que hoy los Veintiocho “han dejado claro que habrá consecuencias para un comportamiento que consideramos inaceptable en el siglo XXI”.
Con respecto a Ucrania, Barroso confirmó el compromiso de la CE y de los Estados miembros en ayudar a Kiev a superar la crisis política y económica en que lleva envuelta ya varios meses.
“Es crucial que Ucrania siga siendo un país democrático y próspero”, afirmó Barroso, que igualmente se refirió a la importancia de las diferentes ayudas ya decididas para asistir en el plano macrofinanciero a Kiev, la última el miércoles con la concesión de una asistencia adicional de US$1.380 millones.
Esa ayuda propuesta se suma a los US$841,9 millones concedidos recientemente, y forma parte de la asistencia financiera que los Veintiocho darán al Gobierno de Ucrania por un montante de US$15.182 millones.
“Mañana (viernes) firmaremos con Ucrania las disposiciones políticas del acuerdo de asociación" entre Bruselas y Kiev, señaló Barroso, que recordó que será el primer ministro interimo ucraniano, Arseni Yatseniuk, quien "sellará el acuerdo para que se acerquen más la UE y Ucrania”.
El presidente del Ejecutivo comunitario señaló que así se ayudará a Ucrania en sus reformas y en la consolidación de su soberanía e independencia.