El gobernador del Putumayo le pedirá al presidente de Colombia que declare el "estado de conmoción interior" para el departamento "tras los ataques de la FARC a la población civil y a la fuerza pública".
Un ataque con explosivos de las FARC derrumbó en la madrugada de este sábado la mitad de una estación policial y causó heridas a por lo menos dos agentes de la institución en Puerto Asís, una ciudad colombiana ubicada en el sur del país.
El general Omar Riaño, comandante de la segunda región de la Policía Nacional, atribuyó el ataque a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que se comprometieron a liberar precisamente este sábado y en una región vecina al soldado Josué Álvarez Meneses, hecho cautivo hace dos semanas en combates.
Riaño especificó ante periodistas que el explosivo detonó hacia las 04.40 hora local (09.40 GMT) en las inmediaciones de la estación de Policía de Puerto Asís, y que su onda expansiva afectó a unas 30 casas.
Los policías heridos fueron trasladados de inmediato al hospital José María Hernández de la ciudad.
Las FARC atentaron a principios de mes contra una estación policial en otro pueblo del Putumayo. Según la inteligencia de la Policía en la región, estas acciones hacen parte de la estrategia de lucha armada insurgente contra la fuerza pública.
Por este motivo, el gobernador del Putumayo, Jimmy Díaz, le pedirá al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, que declare el "estado de conmoción interior" para el departamento "tras los ataques de la FARC a la población civil y a la fuerza pública".
Díaz dijo en Caracol Radio que le elevará este reclamo al presidente en la reunión de gobernadores de departamentos de frontera, que se celebrará entre hoy y mañana en la isla caribeña de San Andrés.
Las FARC perpetraron este viernes un ataque contra un camión militar en el páramo de Sumapaz, muy próximo a la capital colombiana, en el que fallecieron tres soldados.
Esta acción se presentó dos días después de que siete soldados murieran y cinco más resultaran heridos tras un enfrentamiento con las FARC en el departamento del Caquetá, donde según las autoridades esa guerrilla pretendía tomarse el caserío San Antonio de Getuchá.
Las FARC y el Gobierno colombiano negocian la paz en La Habana desde noviembre pasado, mientras que sobre el suelo del país andino prosigue el conflicto armado interno porque en los diálogos está previsto declarar un cese bilateral del fuego sólo cuando las partes logren un acuerdo de paz.