Por decimotercera vez en 11 años, los ciudadanos están convocados este domingo a las urnas para elegir los 165 diputados de la Asamblea Nacional. O lo que es lo mismo, votar a favor o en contra del mandatario socialista Hugo Chávez.
Caracas. Los venezolanos digerían este sábado, otro año más,una nueva oleada de promesas, especulaciones, denuncias y dramaspropios de la eterna campaña electoral en la que viven inmersos ydivididos desde que el presidente Hugo Chávez llegó al poder en 1999.
Pordecimotercera vez en 11 años, los ciudadanos están convocados estedomingo a las urnas para elegir los 165 diputados de la AsambleaNacional. O lo que es lo mismo, votar a favor o en contra delmandatario socialista.
"Cada elección parecieraque es el capítulo culminante de esta telenovela que se alarga en eltiempo. El venezolano lleva todos estos años en una cápsula de estrés,un teatro electoral que no tiene visos de acabar", dijo LeonardoPadrón, un conocido guionista de seriales venezolanos.
Losdías previos a la votación en el país sudamericano ya son clásicas lascompras nerviosas por la incertidumbre, azuzadas por rumores de fraude,advertencias sobre planes de desestabilización y sondeoscontradictorios que se propagan por internet y las redes sociales.
"Hayque vigilar a los escuálidos (opositores) y miembros de mesasescuálidos que intenten sabotear o cantar fraude ante el desespero",avisó @Partisanov, seguidor de Chávez, en el servicio de microbloggingTwitter.
En esta campaña, la tensión política nose trasvasó a las calles como en otros comicios marcados pormultitudinarias marchas y violentas protestas.
Sinembargo, los discursos épicos, llamados triunfales y descalificacionesinflamadas han vuelto a eclipsar la discusión con cifras y propuestaspor parte de ambos bandos, que pese a ocupar varias horas diarias entelevisión rara vez suelen debatir cara a cara en ningún espacio.
"Laretórica política ha hecho que en el día a día las familias, loscompañeros de trabajo, las comunidades, la sociedad esté separada entrechavistas y opositores. No hay espacios para el encuentro ni eldiálogo", consideró el psicólogo social Leoncio Barrios.
"Perono hay mensaje electoral. No es la propuesta lo que pesa. Lo queimporta es si votas a favor o en contra de Chávez. Punto", agregó elprofesor Barrios.
La telenovela electoral. Durantedécadas, el país petrolero fue conocido mundialmente por sus reinas debelleza, sus espectaculares playas caribeñas y los interminablesseriados de televisión que aún enganchan a millones de telespectadoresen todo el planeta.
Pero, desde que en 1998 unmilitar retirado que lideró un golpe de Estado ganara la presidenciacontra todo pronóstico, Venezuela vive su particular "culebrón"político que ha despertado un inusitado interés en la comunidadinternacional.
La agenda "antisistema" de Chávezpronto entró en conflicto con los partidos tradicionales y buena partede la población, lo que desató una serie de violentos capítulos en laque era vista como una de las democracias más sólidas de la región.
Enabril del 2002, los adversarios del mandatario buscaron forzar surenuncia mediante una oleada de protestas callejeras que terminaron enun confuso intento de golpe, frustrado en apenas 48 horas. Más tardeese año, el país también sobrevivió a un desgarrador paro petrolero quecasi arruinó la economía.
Desde el 2004,Venezuela tiene cita con las urnas una vez al año: un referendo pararevocar el mandato de Chávez, las legislativas, las presidenciales, unreferendo para reformar la Constitución, elecciones a gobernadores yalcaldes y en 2009, otro referendo para enmendar la carta magna.
"Laverdad, un poco obstinado de la "votadera" (repetidas elecciones). Lospolíticos deberían hablar menos y trabajar más por la gente. Aquícuando llegan las elecciones parece que el mundo se va a acabar eldomingo", dijo Melvin Rojas, empleado de una cafetería en una popularzona comercial de Caracas.
Eterna batalla por... Chávez. Estedomingo los venezolanos decidirán la conformación de la AsambleaNacional, un ente que ha sido clave en los últimos cinco años para larápida implementación del incipiente y ecléctico "socialismo del sigloXXI" que abandera Chávez.
Como cada batallapolítica en Venezuela, todo gira en torno al presidente y la inminentecatástrofe que acecha a la afortunada nación caribeña. Tanto si gana,como si no.
"Nos estamos jugando el camino quetomará Venezuela: la democracia o permitimos que se nos imponga elcomunismo (...) Tenemos que escoger entre mantener la oscuridad de lanoche con este Gobierno o abrir los pasos hacia la luz del día en elnuevo amanecer de la Asamblea Nacional", instó esta semana el exgobernador y candidato opositor Enrique Mendoza.
"Todoaquel que ame de verdad a la Patria tiene la obligación suprema desumar todos sus esfuerzos en aras del objetivo patriota: ¡Demoler a esaoprobiosa quinta columna que pretende adueñarse de la Asamblea Nacionalpara desestabilizar el país y acabar con la Revolución!", alertó elmandatario en su columna dominical durante la campaña.
Elpróximo año debería ser de descanso electoral, pero todo indica que lapugna por la presidencia del 2012 comenzará mucho antes de loestipulado por la normativa.
"Me declaro enprecampaña por las elecciones que se efectuarán en 2012", dijo Chávezantes incluso de que acabara la actual campaña parlamentaria.
Ycon la promesa del líder bolivariano de permanecer en el poder más alládel 2021, muchos venezolanos temen más de lo mismo, por mucho tiempo.
"Esperoque sea más corto de lo que él promete", opinó Padrón. "Por definición,los seriados que se alargan indefinidamente terminan aburriendo altelevidente", agregó.