A través de un comunicado, el gobierno venezolano afirmó que “considera una demostración de cobardía política, que la clase política española pretenda justificar su fracaso en la lucha contra este flagelo, intentando endosárselo al gobierno y al pueblo de Venezuela".
Caracas. Venezuela calificó de "cobardía" las acusaciones de políticos del gobierno español que vinculan al país sudamericano con el grupo armado separatista ETA en un nuevo choque diplomático entre ambas naciones.
A principios de octubre, en un auto judicial procedente de la Audiencia Nacional española, Juan Carlos Besance y Xabier Atristain, detenidos por tenencia de explosivos y armas e integración en una organización terrorista, aseguraron que recibieron instrucción en territorio venezolano en 2008.
"El gobierno bolivariano considera una demostración de cobardía política, que la clase política española pretenda justificar su fracaso en la lucha contra este flagelo, intentando endosárselo al gobierno y al pueblo de Venezuela", dijo el país sudamericano en un comunicado divulgado la noche del jueves.
"Venezuela exige el cese inmediato de estas declaraciones ambiguas y tendenciosas de parte de altos responsables gubernamentales de España", agregó el documento.
El comunicado del país sudamericano acusa específicamente al ministro del Interior y vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, a la canciller Trinidad Jiménez, y al ministro de Justicia, Francisco Caamaño, de asociar a Venezuela con ETA.
Sin embargo, a principios de octubre, Rubalcaba dijo que el hecho de que dos presuntos miembros del ETA hayan dicho que fueron entrenados en Venezuela no denota una relación del gobierno de Chávez con los adiestramientos.
La semana previa, España solicitó a Venezuela la extradición del presunto etarra Arturo Cubillas por diversos delitos de terrorismo relacionados con el supuesto entrenamiento de miembros de ETA y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el país caribeño.
La Audiencia atribuye a Cubillas -que ha ostentado cargos públicos durante la presidencia de Hugo Chávez- la responsabilidad del colectivo de ETA en esa zona de América y la coordinación de las relaciones con las FARC.
Venezuela ha abierto una investigación sobre las actividades de Cubillas, pero Chávez ha negado siempre cualquier colaboración con ETA y atribuyó las acusaciones de supuestos vínculos con la banda a la "extrema derecha europea" y, sobre todo, "a la española".
El tema ya provocó un impasse diplomático entre Madrid y Caracas el pasado marzo, pero ambos países saldaron la polémica con un compromiso conjunto para luchar contra el terrorismo.