"Repudiamos las propuestas (...) Nuestro pueblo está absolutamente seguro y tiene confianza para, no solamente enfrentar estas amenazas de la Cámara de Representantes, sino para salir adelante si se llegaran a concretar", declaró el canciller Nicolás Maduro.
Caracas. El canciller venezolano Nicolás Maduro rechazó este viernes las advertencias de miembros del Congreso estadounidene, que no descartaron "ninguna opción" en cuanto a sanciones contra el gobierno de Hugo Chávez, y recalcó que estas amenazas sólo avivan el patriotismo.
"Repudiamos las propuestas (...) Nuestro pueblo está absolutamente seguro y tiene confianza para, no solamente enfrentar estas amenazas de la Cámara de Representantes, sino para salir adelante si se llegaran a concretar", declaró el titular de Relaciones Exteriores a la prensa.
Este viernes, los republicanos convocaron una reunión en la Cámara para estudiar nuevas sanciones a Venezuela por su estrecha relación con Irán y su inacción contra el narcotráfico.
En mayo, Estados Unidos impuso sanciones a la estatal petrolera venezolana Pdvsa por sus relaciones comerciales con Irán, que según Washington contravienen las sanciones internacionales decididas contra Teherán por su programa nuclear.
Así, Pdvsa no puede participar en contratos directamente con Washington, acceder a programas de financiación ni obtener licencias para tecnologías petroleras estadounidenses.
Sin embargo, las sanciones no mencionaron el suministro de petróleo venezolano a Estados Unidos, que ronda el millón de barriles diarios.
"Sólo crearon una ola de sentimiento patrio, de solidaridad internacional y ahí está Pdvsa, creciendo, consolidándose. Cualquier amenaza que ellos tomen nos consolida como país", aseguró Maduro.
Este viernes, el jefe de la subcomisión para América Latina de la Cámara de Representantes, el republicano Connie Mack (Florida), insistió en que las sanciones contra Pdvsa no han bastado y en que Venezuela debe ser designada como "Estado patrocinador del terrorismo", calificativo que Estados Unidos aplica a Cuba, Irán, Sudán y Siria. Sin embargo, ninguna decisión fue tomada durante esta reunión.
"No hay extremista fascista en el mundo que pueda amenazar a nuestra patria. Estamos preparados para relacionarnos con los países que consideramos conveniente relacionarnos", retó Maduro.
Refiriéndose a Mack como "loco fascista de la extrema derecha", el canciller consideró que este congresista intenta "imponer una agenda extremista contra varios países en el mundo, entre ellos Venezuela".