Con relucientes tanques, fusiles, cazabombarderos y fragatas, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) mostró su preparación ante una eventual agresión externa, algo que según Nicolás Maduro es planeado por sus adversarios con apoyo de Estados Unidos.
Caracas. Más de medio millón de militares venezolanos sacaron a relucir este viernes su poderoso armamento en unos ejercicios que se extenderán hasta el sábado, en medio de crecientes tensiones entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición que busca desbancarlo.
Con relucientes tanques, fusiles, cazabombarderos y fragatas, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) mostró su preparación ante una eventual agresión externa, algo que según Maduro es planeado por sus adversarios con apoyo de Estados Unidos.
Para Maduro, un ex chofer de autobús de 53 años, el referéndum revocatorio que busca activar la oposición en su contra no es más que un pretexto para una invasión.
"Este referendo es para generar las condiciones para calentar las calles y justificar un golpe de Estado o una intervención extranjera, para eso lo están intentado activar", dijo el mandatario socialista la noche del jueves.
La oposición busca revocar el mandato de Maduro, que termina el 2019, por considerarlo el principal responsable de la crisis que sufre Venezuela y que se ha agravado en las últimas semanas, con una inflación de tres dígitos, recesión y escasez de bienes.
La coalición de partidos de oposición, Mesa de la Unidad Democrática (MUD), acusa al árbitro electoral de querer dilatar el revocatorio, ya que si se realiza el próximo año, la Constitución establece que sería el vicepresidente quien concluiría el mandato y no se celebrarían nuevas elecciones.
No es la primera vez que Maduro ordena ejercicios bélicos. El año pasado, luego de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, declarara a Venezuela como una "amenaza" a la seguridad de su país, el líder bolivariano ordenó prácticas similares.
Sin embargo, los ejercicios del viernes no sólo movilizaban más combatientes, sino que incluían a la Milicia Bolivariana, un cuerpo de civiles con instrucción militar creado por el fallecido Hugo Chávez para complementar las Fuerzas Armadas.
En el ojo de la tormenta. Desde que Chávez, militar de profesión, asumió la presidencia de Venezuela en 1999, las fuerzas armadas han cobrado un papel preponderante en la política del país.
No sólo aumentó su presupuesto año tras año, sino que el fallecido líder socialista les dio derecho al voto, las declaró como "antiimperialistas" y cambió su grito de guerra a la usanza del Che Guevara: "patria, socialismo o muerte".
A pesar de ser un civil, Maduro ha continuado con la militarización de la política criticada por la oposición y, actualmente, casi la mitad de los gobernadores y el 25% de sus ministros son uniformados.
Muchos consideran que la verdadera base de apoyo de Maduro no está en la calle sino en los cuarteles. En el 2015 Venezuela se convirtió en el país latinoamericano que más material bélico adquirió al gastar US$162 millones, según el Instituto de Investigaciones de Paz, con sede en Estocolmo.
Promotores de los derechos humanos sugieren que los ejercicios militares buscan generar temor en la población al demostrar quien tiene el monopolio de la fuerza, mientras que algunos analistas de defensa creen que se trata de un "show".
"El inicio de ejercicios militares por parte del régimen no es sino intimidación pura y dura", opinó el activista por los derechos humanos Miguel Méndez.
Ante la suspicacia de los venezolanos, el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, llamó a la calma.
"Este ejercicio no es para causar ninguna alarma en el país", dijo Padrino en la televisión estatal. "Este ejercicio es el primero en su naturaleza que hacemos en el país, (no sólo) por su alcance nacional (...) sino porque se incorpora un elemento, que es un pueblo organizado para la defensa".
Sin embargo, ante el temor de un estallido social, el líder de la oposición, Henrique Capriles, pidió a los militares venezolanos tomar una decisión para evitar masacres como la producida tras el estallido social del "Caracazo" en 1989.
"Le digo a la Fuerza Armada: aquí está llegando la hora de la verdad, de decidir si usted está con la Constitución o usted está con Maduro. Esa será una decisión que le corresponderá a la Fuerza Armada Nacional tomar", dijo Capriles.