"Las declaraciones de Alvaro Uribe constituyen un intento para minar de forma duradera el posible camino al restablecimiento de relaciones normales con Venezuela", puntualizó un comunicado del gobierno.
Caracas. El gobierno de Venezuela calificó de inaceptablela acusación del presidente colombiano, Alvaro Uribe, de que Caracasviola los derechos humanos de un grupo de supuestos de espías del vecino país que atrapó en su territorio, según un comunicado de lacancillería.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, congelólas relaciones diplomáticas y comerciales entre ambos países desde queBogotá permitió la ampliación de la presencia militar estadounidense ensu territorio, lo que Caracas considera una amenaza a su seguridad.
La cancillería dijo que el conflicto continuaría con el gobierno que Colombia elegirá en mayo.
"Lasdeclaraciones de Alvaro Uribe constituyen un intento para minar deforma duradera el posible camino al restablecimiento de relacionesnormales con Venezuela", puntualizó el comunicado, al tiempo queconsideró que el mandatario colombiano adoptó una "una posicióninaceptable".
El gobierno venezolano anunció esta semana ladetención de ocho colombianos -a quienes Chávez vinculó con el Ejércitodel vecino país andino- que portaban fotos de instalaciones eléctricasde Venezuela, documentos en inglés, cámaras, computadoras y teléfonoscelulares.
Venezuela vive una emergencia en el servicioeléctrico y ha aplicado un racionamiento por la amenaza de no podersuplir la demanda nacional, ante el descenso del nivel de los embalseshidroeléctricos y la falta de alternativas para producir luz.
Colombiaasegura que son 20 los detenidos y Uribe dijo el miércoles que sedesconocen las razones para acusarlos de espías por lo que se violansus derechos humanos.
Chávez critica la cercana relación deUribe con Estados Unidos, que incluye amplios acuerdos militares paracombatir la guerrilla y el narcotráfico, y asegura que el "imperio"pretende cortar su "revolución socialista" para apropiarse del petróleodel país sudamericano miembro de la OPEP.
Venezuela dudó que puedan recomponerse las relaciones con el Gobierno que surja en Colombia tras la elección de mayo.
"Nocontento con haber destruido las relaciones políticas, diplomáticas ycomerciales entre Venezuela y Colombia, (Uribe) ahora pretende forzar aquien le suceda en el cargo a adoptar ese triste legado", dijo elMinisterio de Relaciones Exteriores en el comunicado.
Uribeadmitió que dos de los detenidos trabajaron para un dispensario desalud en el Ejército, uno como médico y una mujer como farmacéutica,pero aseguró que estaban haciendo turismo. También dijo que estánvinculados a una fábrica de helados en Venezuela.
El ministrodel Interior de Venezuela, Tareck El Aissami, había dicho que era"preocupante" la nacionalidad de los detenidos, lo que Uribe considerómuy "grave".