Pasar al contenido principal

ES / EN

Vicepresidente de Bolivia emplaza a ex presidente Quiroga a aclarar uso de gastos reservados
Viernes, Septiembre 10, 2010 - 06:05

En medio de la polémica causada por la condena al ex presidente Jorge Quiroga por injurias, Álvaro García Linera le exigió al ex mandatario responder por el destino de US$79,4 millones de gastos reservados.


La Paz. El vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, exigió al ex presidente Jorge Tuto Quiroga responder por el destino de US$79,4 millones de gastos reservados, manejados en cuatro años de gestión. Quiroga respondió que está dispuesto a someterse a una investigación internacional.

García hizo una relación de los montos de dinero de gastos reservados manejados entre 1999 y 2002. Recordó que en 1999, Quiroga manejó US$20 millones; en 2000, otros US$20 millones; en 2001, US$20,4 millones y en 2002 habría manejado US$19 millones.

“De los gastos reservados él (Quiroga) tiene que dar cuentas; eso no puede quedar impune, ahí hay la sospecha de corrupción y tiene que defenderse, ahí están los malos manejos”, cuestionó el vicepresidente.

La Fiscalía inició una investigación sobre dineros de gastos reservados entre 1995-2005. Quiroga declaró el 11 de junio sobre este caso, ante el fiscal Róger Velásquez, quien en reiteradas ocasiones no descartó convocar a otras autoridades de anteriores gobiernos.

Quiroga respondió este jueves que está dispuesto a someterse a una investigación internacional. “Si tengo recursos mal habidos, sometámonos a una investigación internacional; la Organización de Naciones Unidas (ONU) tiene mecanismos especializados para que investiguen a todos los ex gobernantes”, planteó.

García anunció que impulsarán la investigación y abrió la posibilidad de hacerlo en el marco de la ley anticorrupción. “La Ley Marcelo Quiroga Santa Cruz puede investigar los usos de bienes públicos de manera retroactiva cuando hay actos de corrupción. Nos interesa el tema de gastos reservados, ahí sí se puede decir (que) hay un interés parlamentario”, afirmó.

La ley anticorrupción prevé el principio de retroactividad en la investigación relacionada al manejo irregular de dineros públicos. El delito de enriquecimiento ilícito tiene una condena de cinco a diez años, inhabilitación para el ejercicio de la función pública y/o cargos electos, multa de 200 hasta 500 días y el decomiso de los bienes obtenidos ilegalmente.

Quiroga consideró que no tiene libertad de expresión para defenderse tras la condena de dos años y ocho meses que se le impuso por difamar, calumniar e injuriar al Banco Unión, al denunciar que se convirtió en una “lavandería de recursos mal habidos”.

Los dineros de los gastos reservados debían destinarse a labores de seguridad del Estado. “Le estoy adelantando señor Quiroga, estamos muy interesados por saber qué hizo con los gastos reservados; si manejó bien ese dinero, excelente; si manejó mal asuma la responsabilidad de haber manejado mal los gastos reservados”, insistió García, quien aseguró que el ex presidente no representa ningún peligro político para el MAS por lo que no debiera hablar de persecución.

Durante la gestión del presidente, Evo Morales, se eliminó la partida de los denominados gastos reservados, que se inscribían en los presupuestos.

El ex mandatario Jorge Quiroga afirmó que el vicepresidente Álvaro García “marca la línea y desgasta la imagen de Evo Morales”.

Por su parte, el vicepresidente Álvaro García dijo que “aquí no hay ninguna violación de la libertad de expresión, libertad de expresión no es prostitución de la expresión y el señor Quiroga confundió la libertad con la prostitución, con la degeneración de la libertad de expresión”.

Quiroga demandó a instancias como la OEA, ONU y a Brasil pronunciarse sobre la situación de la democracia en Bolivia. Para García, esa actitud demuestra un “complejo de inferioridad sorprendente” y un “apego enfermizo a la tutela externa”.

Iván Alemán, abogado del también ex jefe de Podemos, anunció el miércoles que apelará la sentencia de su cliente. La justicia, además de los dos años y ocho meses de cárcel, le fijó una multa de 4.000 bolivianos.

Autores

LaRazón.com