La organización Amnistía Internacional (AI) emitió este miércoles un comunicado titulado “Ecuador: no más abuso del sistema de justicia penal para acallar las voces críticas”.

Varios profesionales consideran que el pronunciamiento de la organización Amnistía Internacional (AI) sobre la judicialización de las opiniones en el país, perjudica al Estado y crea una imagen negativa de él a nivel mundial.

Mónica Chuji, ex colaboradora del régimen, afirma que la reciente declaración de AI evidencia que la criminalización que existe en Ecuador ha trascendido al ámbito internacional y que presta especial atención a lo que ocurre en dicho país.

Su caso fue invocado en el reporte con fecha 2 de diciembre del 2011. El organismo manifestó su “profunda preocupación” por el fallo de un año de prisión y US$100 mil de indemnización que Chuji recibió, el 25 de noviembre, en el juicio que le sigue el secretario de la Administración Pública, Vinicio Alvarado, por un criterio que hizo en una entrevista.

“Esta sentencia condenatoria dictada por un juez de Garantías Penales de Quito, forma parte de una serie de casos en los que AI ha documentado cómo el sistema de justicia penal es utilizado indebidamente para menoscabar y restringir el derecho el derecho a la libertad de expresión y pensamiento en Ecuador”, anotó el boletín.

También refirió la querella que el presidente Rafael Correa sigue contra El Universo, sus directivos y un excolumnista, por un artículo de opinión.

El periodista Juan Carlos Calderón, también enjuiciado por el mandatario por ser uno de los autores del libro El Gran Hermano –que versa sobre los contratos de su hermano mayor con el Estado–, cree que la postura de AI constituye una alerta para la comunidad internacional sobre la forma de cómo el régimen está usando la justicia.

Amnistía declaró: “Es de gran preocupación que el gobierno ecuatoriano haga uso indebido del sistema de justicia para acallar críticas legítimas. Estas sentencias condenatorias constituyen un ataque directo a la libertad de expresión y opinión en Ecuador ”.

El experto en derecho internacional Carlos Estarellas Velásquez remarca que el pronunciamiento del organismo no es vinculante, pero que “tiene un peso moral terrible”.

Asegura que cuando una entidad de prestigio como AI emite una opinión de esta naturaleza, su criterio no solo provoca un daño a la administración de turno, sino al Estado como tal.

Explica que todas las acciones que un régimen adopta como parte de su política interna en el país transmiten un mensaje sobre la política externa, pese a que las delegaciones diplomáticas aleguen lo contrario. Y por ello sugiere que el gobierno de Correa debería considerar la opinión de AI.