La semana recién pasada el presidente de Estados Unidos, Barak Obama, propuso sus aliados europeos invertir en defensa ante la situación amenazante de Rusia, pero el llamado no encontró mucho entusiasmo.
Londres. ElEconomista.com.mx. Después de años de presenciar los recortes presupuestarios del Ejército que una vez condujo, Richard Dannatt decidió que la situación entre Rusia y Ucrania abrió la pauta para empezar a reconstruir el Ejército británico.
Dannatt, ahora miembro del Parlamento después de una carrera militar que duró 38 años, esta semana propuso llevarlo a cabo, pero el proyecto de ley fue vetado rápidamente por el gobierno. “Ahora que Putin es incontrolable, no es un buen momento para mostrarnos débiles”, expresó el militar en retiro.
El miércoles, el presidente Obama intentó convencer a sus aliados europeos para hacer frente a la amenaza rusa y volver a hacer inversiones militares considerables. Pero por el momento, parece que los líderes europeos tienen poco interés en modificar sus presupuestos —muchos de ellos en recesión— con el fin de reforzar sus fuerzas armadas.
El gasto militar en toda Europa disminuyó drásticamente después de la Guerra Fría, luego volvió a intensificarse para las guerras en Irak y Afganistán, pero luego de la crisis financiera mundial, hace cinco años, se redujo de nuevo. Sin embargo, el presupuesto de defensa de Rusia ha aumentado más de 30%.
Esta semana, desde Bruselas, Obama criticó a los demás miembros de la OTAN por no contribuir con la defensa colectiva.
“La situación en Ucrania nos recuerda que nuestra libertad no es gratis, tenemos que ser capaces de pagar por los activos, el personal y la formación, para asegurarnos de que tenemos fuerza en la OTAN y contamos con un poder disuasivo muy eficaz”, expresó Obama. “Todos tienen que asegurarse de que están comprometidos e involucrados, lo que ayudará a construir una mayor confianza entre los Estados miembros”.
Sólo unos pocos países, además de Estados Unidos, cumplieron el año pasado con el objetivo de la OTAN de gastar al menos 2% del PIB en defensa. Incluso, algunos de los miembros incondicionales de la alianza han reducido drásticamente su presupuesto en los últimos cinco años.
La disminución del gasto militar en Europa ha generado un profundo malestar entre algunos de los países más pequeños y débiles del continente, los cuales además serían los primeros en perecer si Rusia decidiera extender su territorio más allá de Crimea.
La OTAN advirtió esta semana que Rusia concentró una fuerza inusual en la frontera oriental con Ucrania, lo que podría ser su preparación para entrar, ya sea para tomar el este de Ucrania misma o para llegar a la región de Transnistria. Ambas regiones cuentan con una gran población de habla rusa.