EE.UU. cerrará el grupo militar de su embajada en la capital ecuatoriana por solicitud del Gobierno de Correa, lo que “limitará severamente” la cooperación bilateral en temas de seguridad.
Ecuador pidió el 7 de abril a la Embajada de Estados Unidos que eliminara la oficina de Cooperación de Seguridad, conocida anteriormente como grupo militar, porque consideraba "escandalosa" la presencia de efectivos estadounidenses en el país.
"El Gobierno ha solicitado que esa oficina termine sus actividades para fines de abril y respetamos la decisión soberana (de Ecuador) y estamos en ese proceso de trasladar nuestros recursos", dijo el portavoz de la Embajada estadounidense en Quito, Jeff Weinshenker. "Lamentamos este resultado porque va a limitar severamente nuestra asociación bilateral en temas de seguridad", agregó en una entrevista vía telefónica.
Rafael Correa calificó a inicios de año como "escandalosa" la cantidad de efectivos militares estadounidenses en territorio ecuatoriano y advirtió de que esos funcionarios podrían estar infiltrados en todos los sectores de la nación.
Siete millones de dólares, cada año. La oficina de Cooperación de Seguridad de la embajada entregó casi US$7 millones a Ecuador el año pasado para programas relacionados con capacitación técnica, mantenimiento de vehículos y aeronaves y otros.
El gobierno ecuatoriano había cancelado en diciembre del año pasado los programas de la Agencia Internacional de Desarrollo de Estados Unidos (USAID) por unos US$32 millones, acusándolos de interferir en las decisiones del país.
Y en junio del 2013 renunció unilateralmente a los beneficios arancelarios que el gobierno estadounidense otorgaba a los países andinos por su lucha contra el narcotráfico y en 2009 expulsó a dos funcionarios estadounidenses.
Las relaciones entre Quito y Washington han sido tensas en los últimos años debido a duras críticas de Correa por lo que considera políticas "de intromisión" de Estados Unidos.