El enfrentamiento, cuyas causas aún desconocen las autoridades, ocurre dos días después de que 18 reclusos murieron en un tiroteo en la cárcel de Tela, departamento caribeño de Atlántida, en el que además más de una docena resultaron lesionados.
Un enfrentamiento entre bandas rivales ha dejado este domingo al menos 18 presos fallecidos y uno lesionado en una cárcel cercana a Tegucigalpa, la capital de Honduras, que se suman a los 18 reclusos muertos el viernes en un tiroteo en otra prisión.
El hecho se produjo alrededor de las 14.30 hora local (20.30 GMT) en la cárcel de "mediana seguridad" de municipio de El Porvenir, departamento Francisco Morazán, donde se localiza Tegucigalpa, dijo a medios locales el portavoz de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional (FUSINA), José Coello.
Además de los muertos, dos reclusos resultados heridos con arma blanca, por lo que fueron trasladados al Hospital Escuela de Tegucigalpa, según organismos de socorros, sin ahondar sobre la gravedad de las lesiones.
El enfrentamiento de este domingo, cuyas causas aún desconocen las autoridades, ocurre dos días después de que 18 reclusos murieron en un tiroteo en la cárcel de Tela, departamento caribeño de Atlántida, en el que además más de una docena resultaron lesionados.
Cárceles intervenidas. La prisión de El Porvenir, ubicada unos 100 kilómetros al norte de la capital e inaugurada en febrero de 2015, es una de las cinco cárceles del país que hasta ahora ha sido intervenida por una Comisión Interventora nombrada por el poder Ejecutivo el pasado día 17 para mejorar la seguridad del sistema penitenciario.
El pasado jueves, la Comisión tomó el control de cinco de las casi 30 cárceles del país centroamericano y ayer decidió "acelerar" las fases de la estrategia a ejecutar y elaborar un diagnóstico que permita implementar medidas "urgentes" orientadas a estabilizar el sistema penitenciario.
El sistema penitenciario, compuesto por unas 30 cárceles, alberga a unos 22.000 reclusos, cuando su capacidad máxima es de 8.000, y menos de la mitad de los presos han sido condenados. Las cárceles de Honduras son consideradas una "bomba de tiempo", por el hacinamiento, los problemas de infraestructura y un número de presos en detención preventiva.
Respetar estado de los reclusos. La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas de Derechos Humanos (OACNUDH) expresó este domingo su preocupación por los episodios de violencia registrados los últimos días en dos cárceles de Honduras, que se saldaron con 36 muertos, e instó al Estado a respetar los derechos de los reclusos.
La OACNUDH indicó que "esta gravemente preocupada por los hechos suscitados los últimos días en diferentes centros penales del país que han dejado como consecuencia luto en varias familias hondureñas".
La ONU señaló que "observa con alarma la violencia dentro de los centros penitenciarios" del país centroamericano, que albergan a unos 22.000 presos, de ellos más de la mitad no han sido condenados. Instó al Estado de Honduras a "garantizar la vida y respeto de DDHH de los privados de libertad y a proceder a una investigación pronta, eficaz y transparente" para esclarecer los hechos.