Muchos venezolanos temen contraer el virus porque saben que hay pocos recursos para tratarlo. El gobierno ha exhortado a la población a comprar mascarillas o crear sus propias, para protección.
Caracas. Caracas se despertó este lunes con calles tranquilas y puestos de control militar en el primer día de una cuarentena ordenada por el presidente Nicolás Maduro para combatir el coronavirus, mientras algunos residentes de la capital venezolana salieron portando mascarillas, algunas artesanales.
El gobierno declaró este domingo que ya suman 17 las personas infectadas y declaró la cuarentena en la capital y seis de los 23 estados de la nación OPEP. Las autoridades no han dado detalles sobre dónde están aisladas las personas y han dicho que todos son casos contagiados en el extranjero como España, Italia, Estados Unidos y la ciudad colombiana fronteriza, Cúcuta.
Muchos venezolanos temen contraer el virus porque saben que hay pocos recursos para tratarlo. El gobierno ha exhortado a la población a comprar mascarillas o crear sus propias, para protección.
José Luis Nieves, de 32 años y quien buscaba comida en un vertedero de basura en Plaza Venezuela en Caracas, dijo que no podía quedarse en casa. Gana el equivalente a dos dólares al mes reciclando cartón y plástico que encuentra en la calle.
"Si no trabajamos, no comemos", dijo con una máscara sucia colgando en el cuello. "Si llegamos a ser encerrados 40 días, mis hijos van a morir por hambre. Tenemos que salir".
Las autoridades venezolanas establecieron el lunes puntos de control militar en las vías principales de ingreso a Caracas y rechazaban a algunos conductores, según testigos de Reuters.
En las avenidas de la capital de Venezuela había poco tráfico y transitaban personas con y sin mascarillas. Dentro de algunos supermercados del este de la ciudad estaban policías que no dejaban ingresar a aquellos que no tuviera tapabocas.
Sectores exceptuados por el gobierno de la cuarentena como el de los alimentos anticipa que la contingencia podría extenderse unos 45 días y esperan apoyo oficial para la importación, nacionalización y movilización de materia primas, de acuerdo con representantes del sector.
En Maracaibo, capital del noroccidental estado Zulia, los ciudadanos salieron a la búsqueda de comida y agua.
Reinaldo Urdaneta de 54 años que estaba comprando alimentos en un mercado municipal dijo que aunque adquirió mascarillas para su familia el domingo, ya no tiene dinero suficiente para comprar otras. "Gastaré lo que tengo en agua y comida, porque son 40 días que no voy a poder trabajar", señaló.
En una señal de lo delicado de la situación, el líder opositor, Juan Guaidó, se sumó a los llamados del oficialismo a respetar la cuarentena. "El coronavirus llegó a Venezuela en medio de un colapso total de nuestros servicios", dijo en una nota de prensa divulgada el lunes por su equipo de prensa.
Especialistas venezolanos en infectología y la Federación Médica Venezolana han advertido los riesgos de la epidemia en medio de la crisis hospitalaria y de personal.
Han dicho que ninguno de los 46 hospitales, de la red de 301 centros nacionales, designados por el gobierno como referentes para tratar casos sospechosos están en condiciones de atender pacientes por fallas de servicios.