Con el apoyo de la DEA, las autoridades colombianas desarticularon una red ílicita que movía diariamente unos US$120 mil entre EE.UU., México y el país sudaméricano.
Bogotá. La policía colombiana, con el apoyo de la DEA, desarticuló una red de lavado de activos del narcotráfico que operaba entre Estados Unidos, México y Colombia. Esta operación se realizaba a través de importaciones de computadores y equipos de tecnología, informó este viernes un alto oficial.
El director de la policía antinarcóticos, general Francisco Patiño, dijo que la red desmantelada, después de 18 meses de investigaciones y seguimientos, movía unos US$ 120.000 diarios y estaba al servicio de un cártel del narcotráfico dirigido por los hermanos Javier Antonio y Luis Enrique Calle Serna, más conocidos como los "Comba".
La cadena. La organización iniciaba su cadena en Nueva York, desde donde consignaba dineros producto del narcotráfico en cuentas bancarias mexicanas, las que aparentaban legalidad, a través de empresas ficticias que basaban su actividad en la compra de computadores y piezas para éstos, reveló el oficial.
"Se hacen seis capturas, cuatro de ellas en el territorio colombiano y dos capturas más en los Estados Unidos. Estas personas capturadas en Colombia están solicitadas en extradición por el Gobierno de los Estados Unidos, específicamente por la corte este de Nueva York", dijo Patiño.
El líder de la organización fue identificado como Julio Eduardo Chaparro Escobar alias "Chaparro".
Colombia es considerado como el primer productor mundial de cocaína con unas 430 toneladas métricas anuales, de acuerdo con Naciones Unidas, y uno de los principales abastecedores de la heroína que se consume en Estados Unidos.
Aunque no hay cifras oficiales, el Gobierno y las autoridades encargadas de la lucha contra las drogas, admiten que miles de millones de dólares del narcotráfico ingresan a la economía a través de contrabando, importaciones ficticias y transacciones bancarias, pese a los controles de las autoridades.