Desde marzo de 2009 a la fecha, el Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Conadeh), ha registrado cinco secuestros que de una u otra manera han estado vinculados a comunicadores. Los efectos que producen los delitos ligados a periodistas son la autocensura y la limitación de la libertad de expresión.
Con secuestros y homicidios la criminalidad ha logrado coartar la libertad de expresión.
Desde marzo de 2009 a la fecha, el Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Conadeh), ha registrado cinco secuestros que de una u otra manera han estado vinculados a comunicadores.
El primero se dio contra el hijo de un periodista, otro contra un propietario de medios de comunicación, dos contra periodistas que ejercían su profesión al momento del secuestro y otro que también era profesional del derecho y se dedicaba a su propio negocio.
El mismo informe dado a conocer por el organismo humanitario establece que de las víctimas, tres fueron liberados, uno fue encontrado muerto casi tres meses después de su secuestro en una fosa localizada al pie de una montaña.
En caso de Villatoro, ya son tres los días que ha permanecido plagiado y por eso los diferentes sectores de la sociedad hondureña se han unido en cadenas de oración, pidiendo a Dios que sea liberado sano y salvo lo más pronto posible.
También se han pronunciado los organismos de derechos humanos, organizaciones nacionales e internacionales y representantes diplomáticos acreditados ante el gobierno y pueblo hondureño.
Secuestros. Entre los casos de secuestro que se registran por el Conadeh contra los comunicadores sociales y personas vinculadas a los medios de comunicación se enumeran los siguientes:
El 14 de marzo de 2009, el periodista y abogado Bernardo Rivera Paz, fue interceptado por hombres fuertemente armados que se lo llevaron en su propio vehículo, cuando se dirigía a su finca de café en la aldea Protección, departamento de Santa Bárbara.
Rivera ejerció el periodismo en medios locales de prensa en San Pedro Sula, actividad de la que se retiró para dedicarse a la política y a su profesión de abogado.
El 9 de julio de 2009, su cadáver fue encontrado en una fosa en lo alto de una montaña de la aldea Buena Vista en el municipio de Florida, Copán.
El segundo hecho delictivo se registró el 15 de mayo de 2009, donde el periodista Andrés Torres Rodríguez, director del programa radial “Andrés a las Diez” que se transmite por HRN fue secuestrado a eso de las 5:30PM por personas desconocidas a inmediaciones de la colonia El Sitio de Tegucigalpa.
El 2 de junio y luego de permanecer 18 días en cautiverio el periodista fue dejado en libertad en un solitario sector de Yarumela en el departamento de La Paz.
Mientras que el 10 de enero de 2010, hombres fuertemente armados secuestraron al joven José Luis Maldonado, hijo del periodista Eduardo Maldonado.
El hecho ocurrió en la colonia Miraflores de Tegucigalpa. El menor fue liberado el 5 de febrero luego de permanecer 27 días en poder de sus captores.
El 22 de noviembre de 2011, en diferentes medios de comunicación se informó que René Martínez Vijil, propietario de canal 22 y Radio Comayagua en Comayagua y Radio Dinorama en La Paz, fue secuestrado a eso de las 9:30 AM por desconocidos fuertemente armados mientras transitaba por la colonia Fiallos de Comayagua.
El empresario fue dejado en libertad un día después.Por último el 9 de mayo de 2012, el periodista Alfredo Villatoro, fue secuestrado en horas de la mañana por personas desconocidas, entre las colonias Tres Caminos y Florencia de Tegucigalpa cuando se dirigía a coordinar el noticiero Diario Matutino de HRN. Aún se desconoce su paradero.
Custodio: Respeten la vida de Villatoro. El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Ramón Custodio, hizo un llamado humanitario, a los plagiarios, para que respeten la vida y la integridad física del periodista Ángel Alfredo Villatoro y les suplicó que lo pongan en libertad.
“Hago un llamado humanitario, a los plagiarios, para que pongan en libertad al amigo periodista Alfredo Villatoro, para tranquilidad de sus familiares y de quienes hacemos votos por una Honduras, donde impere la seguridad y el respeto de los derechos humanos”, dijo Custodio.
Explicó, que el delito del secuestro es condenable y es una de las peores formas de violar el derecho a la seguridad e integridad de la persona”.
“Me sumo al llamado patético de sus compañeros de trabajo, de su familia y de miles de hondureños para que liberen al amigo Alfredo Villatoro y que la calma y la tranquilidad llegue nuevamente a su hogar”, expresó.
El Comisionado espera que los plagiarios tomen este llamado como un ruego, como una súplica humanitaria. “Únicamente sumó mi voz a la voz de todo el pueblo hondureño que está de parte de Alfredo Villatoro y que clama por su liberación”, indicó.