Debora y Romina han aparecido en noticieros y diarios, deleitando al público con su alegre charla sobre cómo disfrutar una "cerveza y un Calippo", pero también provocaron comentarios airados sobre la juventud italiana.
Roma. Dos adolescentes de los suburbios de Roma son las nuevas heroínas mediáticas de Italia, después que su relato plagado de jerga sobre un día en la playa se convirtiera en el nuevo éxito de YouTube.
Debora y Romina han aparecido en noticieros y diarios, deleitando al público con su alegre charla sobre cómo disfrutar una "cerveza y un Calippo" (un tipo de helado), pero también provocaron comentarios airados sobre la juventud italiana.
"Stamo a fa la colla" (Nos estamos convirtiendo en pegamento), dijeron en un dialecto romano tan cerrado que Sky TG24, que fue la primera cadena en publicar las declaraciones dentro de una historia sobre la ola de calor en Italia, tuvo que utilizar subtítulos.
Cientos de miles de personas han visto el video en YouTube y otras páginas web, y se ha producido un remix de la grabación en versión disco. Además, comentaristas influyentes se han unido al debate sobre la cultura de la clase trabajadora de los suburbios de Roma.
Las dos chicas, que van regularmente a la playa tras una larga excursión en transporte público desde sus hogares en el sur de la ciudad, son consideradas por algunos como un terrible ejemplo de clase marginal y vulgar.
"Estas chicas de mal gusto no pueden ni usar dos palabras seguidas en italiano, a no ser que quieran parecer más ridículas de lo que ya son", comentó un usuario de YouTube, donde críticos y seguidores tienen abierto un debate.
Pero sobre todo, han sido alabadas como las últimas exponentes de la antigua tradición de sabiduría romana irreverente y equivalente a los héroes del cine clásicos como Pier Paolo Pasolini, el poeta del proletariado romano.
"Por un momento me han devuelto a la época en que era un chico de su edad y también utilizaba expresiones que no eran muy ortodoxas y que desafortunadamente ya no existen", escribió el cómico romano Maurizio Battista en el diario Il Messaggero.
