Los organizadores la llamaron la mayor manifestación antinuclear que Alemania haya visto, y la policía estimó que 100.000 personas participaron en Berlín solamente. Hamburgo, Munich y Colonia también presenciaron grandes concentraciones.
Berlín. Más de 200.000 personas formaron parte de protestas antinucleares este sábado en Alemania, en la víspera de unas elecciones estatales donde la crítica a la política nuclear de la canciller Angela Merkel ya ha dado a la oposición la ventaja.
Los organizadores la llamaron la mayor manifestación antinuclear que Alemania haya visto, y la policía estimó que 100.000 personas participaron en Berlín solamente. Hamburgo, Munich y Colonia también presenciaron grandes concentraciones.
Los manifestantes instaron a que las 17 plantas de energía nuclear de Alemania sean cerradas a la luz del desastre nuclear en Japón, causado por el terremoto y el tsunami. "Fukushima es una advertencia - cierre a todas las plantas nucleares", era una de las consignas.
Los opositores Verdes y socialdemócratas (SPD), que se dirigen a una victoria en las elecciones de este domingo en el estado de Baden-Wuerttemberg que los conservadores de Merkel han gobernado por cerca de 60 años, denunciaron su cambio radical en política nuclear.
Después de aprobar el año pasado una disputada ley para extender la vida útil de las plantas de energía atómica de Alemania y de llamarla una fuente segura de energía, el gobierno de Merkel cerró siete plantas la semana pasada debido al desastre nuclear de Japón y pospuso los planes para extender el uso de la energía atómica.
"Nos manifestamos aquí hoy contra una decisión históricamente mala", dijo el jefe parlamentario de los Verdes, Juergen Trittin, refiriéndose a la extensión de la energía nuclear el año pasado.
Baden-Wuerttemberg, en el suroeste de Alemania, es un centro industrial donde los Verdes ya han sido reforzados por protestas locales contra un gran proyecto de infraestructura en Stuttgart respaldado por los demócratas cristianos de Merkel.
El estado es hogar de uno de los siete reactores cerrados, Neckarwestheim I.
El día después del terremoto y el tsunami de Japón, cerca de 50.000 activistas formaron una cadena humana de 45 kilómetros en una protesta prevista entre la capital del estado, Stuttgart, y Neckarwestheim para exigir su desaparición.
Las plantas nucleares de Alemania son operadas por E.ON, RWE, EnBW y Vattenfall.