El informe de las Naciones Unidas señaló que sigue siendo posible lograr el umbral de temperatura más seguro fijado en París -de 1,5 grados-, aunque exigiría reducir las emisiones un 7,6% al año entre 2020 y 2030.
Ginebra. Las emisiones de gases de efecto invernadero registraron un alza récord el año pasado y las temperaturas mundiales podrían subir más del doble del límite acordado si no se hace nada para remediarlo, indicó este martes un informe de la ONU.
El "Informe sobre la Brecha de Emisiones" es uno entre varios estudios publicados antes de la cumbre sobre clima que celebrará Naciones Unidas en Madrid la próxima semana, con el objetivo de persuadir a los líderes mundiales para que frenen el cambio climático.
El reporte calcula el volumen de reducción de emisiones necesario para contener el aumento de la temperatura global a 1,5 grados centígrados por encima de los niveles de la era preindustrial, tal y como se estableció en el Acuerdo de París de 2015.
El año pasado, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU advirtió de dramáticos cambios a escala mundial si no se cumple dicho objetivo, tales como la pérdida de casi todos los arrecifes de coral y la mayor parte del hielo marino del Ártico.
De acuerdo a las promesas actuales de reducción de emisiones, "es de esperar que las temperaturas aumenten en 3,2 grados centígrados en este siglo, lo que traerá consigo vastas y destructivas consecuencias climáticas", indicó un sumario del informe realizado por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
"Ya soy abuelo y no queremos dejar esto a nuestros nietos", dijo el autor principal del reporte, John Christensen, en una conferencia de prensa.
El estudio señaló que sigue siendo posible lograr el umbral de temperatura más seguro fijado en París -de 1,5 grados-, aunque exigiría reducir las emisiones un 7,6% al año entre 2020 y 2030. Limitar el avance a 2 grados requeriría recortes anuales del 2,7%.
"Estamos hablando de un cambio transformador ahora. Un simple cambio incremental no lo logrará. Tenemos que transformar las sociedades en los próximos 10 años", dijo Christensen. "Cuanto más esperemos, más difícil será".
El informe mostró que las emisiones, incluidas las derivadas de cambios en el uso de la tierra como la deforestación, no han tocado su máximo aún, aunque ascendieron a una cifra récord de 55,3 gigatoneladas de dióxido de carbono equivalente en 2018.
El reporte identificó a Estados Unidos como uno de los mayores emisores que, junto a Brasil y Japón, se están quedando por debajo de sus propios objetivos. Washington presentó este mes la documentación necesaria para comenzar el proceso de salida del Acuerdo de París.
"Si lo hubiéramos hecho hace 10 años habría sido más fácil", dijo Inger Andersen, directora ejecutiva del PNUMA. "Pero el momento y la oportunidad son ahora".