Algunas de las acciones que se desarrollarán serán la implementación de esquemas de nutrición de niños, mujeres y adultos mayores, brigadas de atención médica y programas productivos y de empleo adecuados a las costumbres.

El presidente de México, Enrique Peña Nieto, inicia este lunes su Cruzada Nacional Contra el Hambre, uno de los programas prioritarios de la actual Administración para abatir la pobreza, que afecta a 52 millones de ciudadanos en el país.

El mandatario ha elegido para presentar este programa el municipio de Las Margaritas, una de las localidades ocupadas por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en 1994, en el suroriental estado de Chiapas, uno de los más pobres de México.

Pese a que no se han dado a conocer muchos detalles del plan, medios locales han publicado que algunas de las acciones que se desarrollarán serán la implementación de esquemas de nutrición de niños, mujeres y adultos mayores, brigadas de atención médica y programas productivos y de empleo adecuados a las costumbres.

Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) correspondientes a 2010, en México 46,2 % de la población vive en la pobreza, lo que equivale a 52 millones de personas.

De los 2.500 municipios que hay en México, el plan abarcará a unos 400, los que tienen más altos índices de marginación social, pobreza y desarrollo humano.

En la presentación de mañana participará también la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, dependencia responsable de los programas antipobreza y se presume que en el plan se involucren otras secretarías como la de Agricultura, Defensa Nacional y Educación.

Entre los objetivos que Peña Nieto se marcó el pasado 1 de diciembre cuando asumió la presidencia está el de la inclusión, es decir, llegar a conseguir un país con menos pobreza y desigualdad.

El EZLN, que nació a la luz pública el 1 de enero de 1994 con la toma armada de poblados en Chiapas, resurgió el pasado 21 de diciembre con manifestaciones pacíficas en las que participaron cerca de 40.000 personas para insistir en sus demandas de que sean atendidas las comunidades indígenas marginadas.

A través de una carta, el líder del movimiento, el "subcomandante Marcos", pidió el 31 de diciembre al nuevo Gobierno mexicano que cumpla compromisos anteriores para elevar al rango constitucional "los derechos y la cultura indígenas".

El Gobierno mexicano creó la pasada semana una Comisión para el Diálogo con los Pueblos Indígenas de México, con el objetivo de atender la "deuda histórica" con las comunidades autóctonas del país, que son las que ostentan los índices más altos de pobreza.