En Baja Verapaz, al cierre de 2012 la cantidad de niños con desnutrición fue de 407 casos registrados y doce fallecidos en todo el departamento.
A pesar de que autoridades departamentales aseguran que en Baja Verapaz se trabaja de lleno con el Programa Hambre Cero, que promueve el Gobierno, durante este año se han detectado al menos 70 casos de desnutrición crónica y aguda, que han cobrado la vida de tres niños.
Ruby Morales Sandoval, nutricionista en funciones del Área de Salud, explicó que en lo que va del año se han reportado tres muertes de niños menores de 5 años por causa de la desnutrición.
Señaló que dos de las víctimas eran de la aldea Monte Blanco, Purulhá, y la otra de San Jerónimo; esta última había sido priorizada para ser beneficiario del Programa Hambre Cero.
Morales explicó que en total se tienen 70 casos de desnutrición documentados en ese departamento, de los cuales 21 son severos, y 49, moderados.
Cifras en aumento. Estadísticas de 2012 del primer trimestre, revelan que fueron 54 casos de desnutrición los que se atendieron en Baja Verapaz, 33 moderados y 21 severos, y hubo dos muertos.
Al cierre de ese año la cantidad de niños con desnutrición fue de 407 casos registrados y 12 fallecidos en todo el departamento.
El municipio más afectado por este flagelo es Purulhá, con 38,18% de casos por cada 10 mil habitantes.
Morales afirma que el año en el que más niños desnutridos se reportaron fue en el 2010, con 675, pero que poco a poco esta cifra ha ido bajando.
Reconoció que se trabaja principalmente en la localización de casos, por lo que hay momentos en que se eleva el número.
Vigilancia se mantiene. Emilio Hernández, jefe del Área de Salud, indicó que se mantiene la vigilancia, pero uno de los grandes retos es contar con un registro real de esta problemática, pues los datos que se tienen sólo dan cuenta de los afectados que llegan a los centros asistenciales, pero no todos son llevados a recibir atención médica.
Hernández enfatizó en que no se ha hecho un trabajo fuerte para controlar las medidas antropométricas como talla, peso y crecimiento de los niños.
Según las autoridades, las personas de escasos recursos económicos, que solo producen para su subsistencia, son los que tienen mayor riesgo de sufrir desnutrición severa.
Hernández dijo que es necesario reforzar la asistencia técnica para que los agricultores mejoren sus cosechas, pero también la diversificación de sus productos y que tengan cómo mejorar la alimentación de sus familias.
“Nosotros como sector Salud hemos sugerido que se implementen políticas integrales de desarrollo rural, que es donde está el problema de la desnutrición. Si esto no se hace, Salud siempre atenderá la emergencia”, añadió Hernández.
Autoridades aseguraron que se implementó la Unidad de Recuperación Nutricional en Purulhá, y se lucha para que sea un centro formal, para lo cual ya se cuenta con Q1 millón para empezar la construcción del centro, pero faltan fondos para equiparlo, aunque se coordina con entidades internacionales y estatales para lograrlo.
Otros datos. María Elena Alas, directora del Área de Salud de Chiquimula, dijo que en lo que va del 2013 se tienen reportados 289 casos de niños con desnutrición en ese departamento.
De la totalidad de estos, 102 son severos y 187 moderados.
Además, se han registrado dos muertes, pero asociadas a otros padecimientos como la hidrocefalia e insuficiencia cardíaca.
En Jalapa se ha documentado la muerte por desnutrición de cuatro infantes, y de enero último al 15 de marzo de este año se habían atendido 37 casos.
El año pasado no se reportó ninguna muerte por desnutrición en ese departamento.