Por Bárbara Silva, fundadora de BSTinnovation, plataforma que impulsa la innovación empresarial en conexión con modelos de innovación desarrollados principalmente en Silicon Valley.
Estudios efectuados por la Escuela de Psicología de la UAI y Visión Humana indican que 63% de las personas en las empresas se muestran insatisfechas por las pocas oportunidades para crear e innovar que existen y las escasas posibilidades de capacitación y desarrollo (62%).
¿Qué es innovación empresarial? ¿Cómo se gestiona? La definición de innovación trae implícito dos conceptos relevantes; la creación de valor e impacto. Una forma simple de definir innovación es: una idea (que resuelve un problema de un cliente), que llega al mercado y que tiene un impacto económico y social.
La innovación comienza por las personas, para generar resultados extraordinarios, y junto con contar con personas excepcionales, se requiere salir a explorar referentes potentes de gestión, liderazgo, estilos de cultura organizaciona y gestión del talento que inspiren a los líderes organizacionales a tomar acciones y movilizar a sus organizaciones al siguiente nivel.
Las organizaciones son el reflejo de sus líderes y de quienes toman decisiones, si ellos comienzan a generar pequeños cambios en su estilo de management, sin duda se verá reflejado en el comportamiento general de la organización. Como diría Peter Drucker, es relevante invertir en el talento de las personas, motivándolas a través de desafíos e incorporándolas en los logros organizacionales, así se sienten parte del éxito y de los fracasos.
En los últimos años he invertido en el establecimiento de puentes en Silicon Valley, donde se alojan muchas de las mayores corporaciones de tecnología del mundo y miles de startups.
La clave del éxito de Silicon Valley ha sido la inversión y valoración de su activo más importante “las personas”, que impulsan la economía y dan forma a la calidad de vida de la región. La fuerza laboral compuesta por un 50% de inmigrantes altamente educados es un valioso recurso para la generación de innovaciones, ideas, productos y servicios, fortaleciendo el espíritu emprendedor de la población.
En Silicon Valley, empresas como Facebook, Apple, Google o Amazon tienen algo en común y es cómo gestionan el talento con foco en la innovación y desafíos. En Apple, por ejemplo la primera práctica de retención del talento es inspirando a los empleados a realizar el mejor proyecto de su vida y en Facebook es sensibilizándolos respecto al impacto que puede tener su trabajo en el mundo.
Realizar el mejor trabajo de su vida, significa estar a la vanguardia, mantener acceso a conocimiento, así como contar con un gran equipo, herramientas, recursos y autonomía. Impacto en el mundo tiene que ver con la creación de productos o servicios que cambian de manera significativa la vida de las personas, junto con contribuir al medio ambiente y hacer del mundo un lugar mejor.
Una gran diferencia cultural entre las personas en Chile y Silicon Valley, es que en este último comprenden que los éxitos se construyen típicamente de muchos fracasos y son conscientes que las fallas son parte del proceso y deben ser vistas como oportunidades para aprender, crecer y mejorar.
La conciencia de la falla ha inculcado en las personas un fuerte sentido de la capacidad de recuperación y reinvención. Cuando el plan A no funciona, giran rápidamente al Plan B y luego al C y al D. Esta mentalidad resiliente está conectada con el rediseño. La creencia generalizada es que todo el mundo puede (y tal vez debería) re-diseñar todo, incluso, a sí mismos.
En relación al sentido de rediseño característicos del espíritu de Silicon Valley ¿En Chile los gerentes están preparados para gestionar las fallas de sus talentos?