Tony Hsieh afirma que prefiere la experiencia a cosas materiales.

Quien sueña con ganar millones, probablemente, también sueña lo que hará con el dinero si logra obtenerlo."Coches, casas, yates, viajes: opciones abundan para aquellos que pueden tomar ventaja de una gran fortuna. Pero, ¿y si usted era el dueño o líder de un negocio de mil millones de dólares y tenía sólo cuatro pares de zapatos en su armario? Tony Hsieh, CEO del e-commerce Zappos, es este tipo de empresario: vive en un remolque cuyo alquiler vale menos de mil dólares al mes.

Hsieh está por delante de una de las mayores operaciones electrónicas en el mundo, que se inició en el campo de los zapatos y luego abrazó el mercado global de la ropa. Con sede en Las Vegas, Zappos fue fundada en 1999. En 2014, la compañía obtuvo unos 54,5 millones de dólares en ganancias. Como director general desde el inicio del negocio, el empresario de 41 años ha alcanzado el nivel de multimillonario. ¿Por qué, entonces, sigue viviendo en un remolque en un parque en Las Vegas?

En una reciente entrevista con ABC Nightline, declaró que se preocupa más por las experiencias que las cosas materiales, y por eso decidió abandonar la vida opulenta que su fortuna podía ofrecer. En vez de vivir en una mansión, prefiere hacerlo en un remolque, y así lleva una vida que siente más tranquila.

El parque donde se encuentra su remolque es de él, y en este se encuentran varios otros, habitados en su mayoría por sus amigos y jóvenes profesionales que trabajan en Silicon Valley o cerca. El sentido de comunidad es el factor más agradable de Hsieh: "Me encanta estar aquí por la noche. Hay fogatas y luces, a veces hay músicos tocando y personas cocinando. Realmente me encanta la imprevisibilidad que encuentro aquí", dijo a Nightline de la cadena ABC.

No es sólo en su vida personal que Hsieh cultiva una postura diferente. La forma de gestionar Zappos es también inusual: no hay "jefes" y entre los propios empleados deciden sus propios salarios sobre la base de los presupuestos de cada departamento. Puede parecer utópico, pero el hecho es que el negocio funciona: es rentable y tiene poder de mercado.

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