Esta yerba, que puede beberse amargo o endulzado con azúcar, también se consume en menor medida en Paraguay, partes de Brasil, Chile, Bolivia e, incluso, en Líbano y Siria.
El mate es inherente a la cultura de Uruguay y Argentina, a la par de los asados y el fútbol. Su popularidad es tal, que el consumo de yerba mate de los uruguayos es de quince kilos por cabeza y el de los argentinos siete, de acuerdo a datos entregados por el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM).
Pero, ¿por qué se consume tanto mate en ambos países? El viceministro de Turismo de Uruguay, Benjamín Liberoff, explica que la costumbre de beber esta infusión no tiene como objetivo saciar la sed, sino que está relacionada principalmente a socializar entre pares.
“Según el lugar, el momento, o con quién se toma mate, éste adquiere diversos significados. Puede ser un alimento, o tan solo el compañero de horas lerdas”, explica la autoridad.
Pero incluso es más que eso. “Es un elemento de comunión o inclusive un gesto de bienvenida para quien es recibido con un “mate calentito” en la puerta de la casa. El mate es tomado, generalmente, en forma compartida. En una reunión de amigos y familiares se comparte el mismo recipiente y la misma bombilla, pasándolos de una persona a otra”.
Para Liberoff, es esto lo que lo distingue “notablemente” de la forma en que se comparten otras infusiones, como el té o el café.
El mate, que puede beberse amargo o endulzado con azúcar, también se consume en menor medida en Paraguay, partes de Brasil, Chile, Bolivia e, incluso, en Líbano y Siria.
Propiedades y beneficios
Tradicionalmente, el mate se prepara en un recipiente hecho de calabaza que antes de ser utilizado para colocarle la yerba deberá ser tratado especialmente o como se conoce popularmente “curado”.
La yerba mate tiene propiedades estimulantes para la actividad física y mental superiores al café, pues su efecto dura más tiempo y no provoca insomnio.
También presenta más antioxidantes que el té verde, contiene polifenoles –antioxidantes que ayudan a fortalecer las defensas del organismo–, e inhibe la oxidación de LDL.
Del mismo modo, este insumo no tiene calorías y aporta al organismo minerales como potasio, magnesio y manganeso; vitaminas como B1 y B2; y quince tipos de aminoácidos.
Cómo preparar el mate:
1.- Coloque aproximadamente 2/3 de yerba.
2.- Incline la yerba hacia uno de los lados, permitiendo que quede un espacio vacío desde el fondo hacia la abertura del mate.
3.- Vierta agua tibia en el espacio vacío, manteniendo el mate inclinado, hasta que la yerba se hinche.
4.- Introduzca la bombilla dentro del mate, en el centro del hueco, tapando la boquilla con el pulgar.
5.- Finalmente, vierta el agua caliente (sin llegar al punto de hervor) para obtener la infusión.