El programa de Conacope, que busca impulsar la productividad de la microempresa mexicana, plantea el otorgamiento de créditos autosustentables, a fin de facilitar el crecimiento de las mipymes.
La Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño (Canacope) presentó, ante la Secretaría de Desarrollo Económico de la Ciudad de México (Sedeco), un proyecto para impulsar a las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) de la Ciudad de México.
En entrevista con El Economista, Ada Irma Cruz Davalillo, presidenta de la Canacope, platicó que el programa de impulso a la productividad de la microempresa mexicana, plantea el otorgamiento de créditos autosustentables, a fin de facilitar el crecimiento de las mipymes.
Aunque la directora dijo que la cámara no ha tenido acercamiento con la Secretaría de Economía federal, sí lo han hecho con la Sedeco, institución a la que se les presentó el proyecto de apoyo a mipymes, que “creemos puede ser una solución para que se dé ese impulso a la economía local”.
Ada Irma mencionó que muchos de los apoyos que se han dado por parte del gobierno es a fondo perdido y no todos debería de ser así, sobre todo porque “el empresario o comerciante no quiere que le regales el dinero, quiere que se lo des para que lo pueda poner a trabajar. La forma de hacerlo es a través de surtirse de lo que necesita su negocio”.
Aunque la presidenta no entró en detalles al respecto del programa, sí dijo que éste se basa “en otorgar créditos en especie a través de un fondo generado por la recaudación de impuestos del sector”, crédito al cual el empresario puedan volver a tener acceso en tanto termine de pagarlo.
El monto de crédito no supera los 10,000 pesos pero servirá para comprar más maquinaria.
Ada Irma recordó que en el sexenio anterior existía un programa al comerciante que otorgaba 2,000 pesos, para pintar el negocio o hacer alguna modificación, y aunque la intención era buena, el monto realmente no iba al negocio, sino que se utilizaba para pagar alguna deuda.
“En la cámara tenemos una vitrina de proveedores que son miembros y están dispuestos a dar créditos competitivos. Un crédito que es accesible, autosustentable y puede ser renovable a la medida que el empresario lo pueda pagar y ayude a su crecimiento”.
El objetivo del programa es que el comerciante tenga la posibilidad de crecer. “Sabemos que pueden convertirse en una empresa mediana o grande que pueda trascender. Ejemplo de ello es Bimbo o La Costeña, empresas que comenzaron siendo pequeñas y familiares y se convirtieron en las grandes marcas”.
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