Eso se definió en el Congreso CASE Latinoamérica 2011, el Universidad Iberoamericana.
Para que las instituciones de educación superior puedan ofrecer una educación de calidad y enfrentar las restricciones presupuestales, deben recurrir a sus egresados como una vertiente de financiamiento alternativa.
En ocasión del Congreso del Council for Advancement and Support Education (CASE) Latinoamérica 2011, que se lleva a cabo del 6 al 8 de abril en la Universidad Iberoamericana en la que participan más de 130 profesionales de la recaudación de fondos de 40 universidades de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Honduras, México, Perú y República Dominicana, Bill Kavan, Vicepresidente de SunGard Higher Education, y experto internacional en materia de fomento y desarrollo institucional para la educación superior, ofreció una conferencia sobre este tema, de importancia fundamental para las universidades de América Latina.
Kavan comentó que prestigiosas universidades como Harvard, Stanford, Princeton, la de California, Columbia y Nueva York, así como la London School of Economics, han logrado sus máximos niveles de calidad educativa e investigación gracias a los donativos de los egresados, ya que estos recursos permiten financiar investigaciones y crear fondos de inversión que sirven para fortalecer las instituciones en su nivel académico y apoyo a alumnos.
Durante su presentación, Kavan mencionó que, en 2008, la recaudación de fondos en Estados Unidos alcanzó los 11 mil millones de dólares. También comentó que 56% de las 100 universidades más importantes de Estados Unidos, en lo relativo a recaudación de fondos, usan la tecnología de SunGard Higher Education para sus programas de desarrollo institucional.
Presentó también los resultados de un estudio realizado, donde se muestra cómo la tecnología puede contribuir a potenciar el logro de metas en materia de fomento y desarrollo institucional para las universidades. Sin embargo, advirtió: “La tecnología no es suficiente. La tecnología permite ser más eficiente y efectivo. Pero los esfuerzos de desarrollo institucional deben estar basados en una planeación integral, coordinados con todas las áreas de las instituciones y orientados en forma estratégica.”
Kavan hizo referencia a diversas estrategias que las oficinas de fomento y de desarrollo institucional están utilizando hoy en día a escala mundial para llevar a cabo una vinculación permanente con egresados, a fin de aprovechar el potencial que tienen para convertirlos en donantes amplios, activos y recurrentes, lo cual se ha convertido en una herramienta clave para las instituciones de educación superior que pretenden ser competitivas en el siglo XXI.
Señaló la importancia creciente que están desempeñando los medios sociales y las aplicaciones y dispositivos móviles en este esfuerzo, dada la transformación que las nuevas generaciones (nacidas después de 1982), asignan a Facebook, Twitter, LinkedIn, Flickr, y otras redes para establecer sus vínculos y comunicaciones. Dijo que, por ejemplo, el mail marketing es el estándar actual para vincularse en muchas instituciones, pero que no se está haciendo necesariamente en forma estratégica, y definitivamente ya no es atractivo para las generaciones actuales.
Kavan dijo que es importante estar al pendiente de los cambios constantes en la tecnología y la demografía para mantenerse vigente. Afirmó que la tecnología permite identificar a los donantes, categorizarlos, clasificarlos y optimizar las campañas de recaudación de fondos para llevar a cabo de manera sistemática los esfuerzos de acercamiento con egresados y donantes. Por eso es importante que las instituciones de educación superior inviertan crecientemente en herramientas tecnológicas que les permitan administrar eficiente y estratégicamente la información de los egresados.
Kavan hizo referencia al caso de la Universidad de los Andes de Colombia (Uniandes), donde la conjunción de un proyecto institucional y el soporte de la tecnología y la consultoría de SunGard Higher Education, ha permitido fortalecer el vínculo con sus egresados y recaudar fondos para atraer y retener a profesores de nivel doctorado que enseñan e investigan, becar a alumnos de excelencia de escasos recursos e incrementar los proyectos de investigación de esta universidad, para seguir consolidándola como una institución de alto prestigio académico en Latinoamérica y el mundo.