Jeff Kepner recibió las extremidades hace siete años y hoy las considera completamente disfuncionales y se arrepiente de haber cambiado sus prótesis.
El Espectador. Jeff Kepner perdió sus manos en 1999 debido a una grave infección que sufrió. Diez años más tarde, se convirtió en la primera persona de Estados Unidos en tener un trasplante de ambas manos, mediante una cirugía innovadora, pero no del todo probada.
Y lo que supondría una mejora en su vida, resultó ser una carga. Siete años después del procedimiento, el hombre de 64 años pidió que le sean retiradas, por considerarlas completamente disfuncionales.
“Desde el primer día, nunca he sido capaz de usar mis manos”, dijo Kepner tiempo después de ser reemplazadas sus prótesis por nuevas extremidades. “No puedo hacer absolutamente nada”, remató el paciente, quien aseguró que, pese a que la cirugía era experimental dice que es 0 % útil.
No obstante, la eliminación de las manos no garantiza que pueda volver a usar sus prótesis y los médicos presumen que tendría muchas complicaciones. Además, Kepner ha permanecido suficiente tiempo en el quirófano y aseguró que no piensa atravesar por esas operaciones de nuevo.