Los estudios consistirán en comparaciones moleculares entre la nueva vacuna y una que ya está en circulación, que Paraguay propuso que sea la AstraZeneca (AZD), que es la que más se está utilizando a nivel mundial.
Ciudadanos de 18 a 55 años de edad podrían ser parte de la fase III de los ensayos clínicos para la vacuna contra el covid-19 que está desarrollando la compañía taiwanesa Medigen Vaccine Biologics Corporation (MVC). En la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) ya está lista la infraestructura y sólo se aguarda la confirmación de la empresa.
En principio, los test comenzarían en la tercera semana se julio, explicó el profesor doctor Luis Armoa, quien tiene a su cargo el equipo de investigación en la Facultad de Ciencias Médica. Él detalló que Paraguay fue invitado a participar de los ensayos, aplicó y fue uno de los cinco países que clasificó, pero aún se espera la confirmación final.
Será la primera vez que Paraguay participe en pruebas para una vacuna, lo cual es un gran desafío.
Armoa detalló que, de aprobarse el plan, personas de 18 a 55 años serían convocadas. Luego de hacerse los estudios médicos pertinentes, se les aplicaría una vacuna, sin decirle cuál al participante. A las tres semanas, nse les tomarán muestras para ser analizadas.
Los estudios consistirán en comparaciones moleculares entre la nueva vacuna y una que ya está en circulación, que Paraguay propuso que sea la AstraZeneca (AZD), que es la que más se está utilizando a nivel mundial, indicó Armoa.
Los profesionales del área analizarán así en los laboratorios de nuestro país, la tolerancia, la eficacia y la inmunogenicidad de la nueva vacuna, que se está
desarrollando en Taiwán y cuya plataforma es ARN Mensajero.
El profesor doctor señaló también que la intención es que participen de la fase III de los ensayos clínicos, ciudadanos de Asunción, Central y Alto Paraná, tendiendo en cuenta el índice poblacional de esas regiones y que también son las zonas donde más casos de covid-19 existen.
LAS VENTAJAS
Luis Armoa contó que los interesados en participar de los ensayos clínicos tendrían un seguimiento de su estado de salud durante todo el estudio, que dura ocho meses y luego los médicos le realizarán un año más de seguimiento. Esto incluiría una cobertura médica para cualquier patología que pueda desarrollarse a partir de la aplicación de la vacuna.
una vez aprobada la vacuna podrán recibirla de manera prioritaria, lo cual es una ventaja para el país si se tiene en cuenta que actualmente el plan de vacunación no puede avanzar por falta de biológicos, que se compraron, pero no están llegando.
“Tenemos que ver que esto genere expertos en esa área, que haya gente que se forme con esto. Es por eso que le dimos el liderazgo a la Facultad de Medicina”.
señaló respecto al tema el director de Vigilancia de la Salud, doctor Guillermo Sequera. Taiwán nos preguntó si estábamos interesados, dijimos que sí y recomendamos que sea haga con la UNA”, añadió.
“Muchos países de la región ya hacen ensayos clínicos y nosotros no hacemos. Hay que hacer; estamos muy atrasados en el desarrollo de biológicos en nuestra
región. Llegó el momento de discutir en el país este tipo de cosas. Es una discusión ética que como sociedad debemos debatir”, añadió Sequera.
“Desde el Ministerio de Salud nosotros vemos con buenos ojos y vamos a apoyar con todo lo que es la evaluación ética, toda la parte logística que necesiten.
Vamos a darles todo el apoyo como Ministerio de Salud”, indicó igualmente el director de Vigilancia de la Salud.